Opinión

Davalor, el caso de la vergüenza

Como no cabría esperar de otra manera, casi en línea con la actualidad política de la futura amnistía para presos y en un ambiente donde más que nunca, se está politizando el poder judicial, el caso Davalor se cierra sin terminar digo sin terminar, porque legalmente parece ser que se terminan las actuaciones judiciales por defecto de forma procesal.

Es a todas luces desesperante que desahucien a una persona por dejar de pagar 100€ al banco de su piso o que una pyme tenga que ser embargada por dejar de adelantar el IVA. El primer caso importante en Navarra de prevaricación confirmado con un desfalco de millones de euros. ¿Quién no será capaz de pensar que la justicia está de parte a veces de aquellos que la mancillan? ¿Quién confiara en la libertad plena de poderes al ver estas noticias? ¿Qué gobierno no se presenta como acusación particular y obliga al esclarecimiento con todas las responsabilidades? ¿Cuantas pymes navarras necesitan una parte de esa ayuda y no la consiguen? ¿Dónde está la responsabilidad del gobierno como vigilante de sodena?

Al final por desgracia, el guion de la degradación social y económica se está cumpliendo gracias sobre todo a la incomprensión de una parte de la sociedad que “Davalor” a esta mentira. No sé si cabe algún recurso pero es necesario sobre todo, para liberar el órgano de la justicia de toda duda y para recobrar la libertad y derecho en que la justicia es igual para todos.