En el corto espacio de tiempo que va desde principios de dos mil veintiuno hasta finales de dos mil veintitrés, las gigantescas máquinas trituradoras de pájaros del Parque Eólico Cabanillas II han acabado con la vida de setenta y cinco buitres leonados.
Ahora, el mismo grupo empresarial que explota Cabanillas II quiere plantar varias máquinas iguales en el Parque Eólico Cabanillas I.
El buitre leonado es una especie protegida en Navarra y abundante en el Monte de Cabanillas. La altura del vuelo de estos animales coincide, exactamente, con la altura de los aerogeneradores. Por eso son tan mortíferos.
Los promotores dan por hecho que, si no se van, los buitres seguirán muriendo en los parques de Cabanillas. Para ellos lo fundamental, lo innegociable, es que su proyecto salga adelante.
¿Qué medidas preventivas y correctoras proponen los empresarios eólicos para frenar la matanza?.
Proponen cuatro medidas, dos de ellas perfectamente inútiles como son el recuento y censo de buitres muertos y el seguimiento de ejemplares. Inútiles porque ya sabemos cuántos buitres mueren, dónde y por qué.
Y dos “medidas estrella”, que suponen trasladar a terceros la carga de su implantación y seguimiento y que son el cambio de situación de los muladares y que se obligue a los ganaderos de Cabanillas a seguir ciertas pautas en la gestión de cadáveres de reses. Así se refleja en la página 303 del Estudio de Impacto Ambiental presentado, punto 14.3.1.8.
Hay que conseguir que los buitres ni se acerquen, hay que echarlos de su hábitat y que se vayan a comer a otro sitio. Y todos han de poner su granito de arena para lograrlo.
En Febrero de dos mil dieciocho, con ocasión de la autorización del Parque Cabanillas II, el Gobierno de Navarra valoró el impacto de la instalación sobre los buitres leonados y otras aves como severo aunque de baja magnitud debido a que la mortalidad registrada en el parque eólico ya existente de Cabanillas I no era elevada.
Si el Gobierno de Navarra no modifica el criterio utilizado para autorizar Cabanillas II, debería ahora, a la vista de lo ocurrido en estos tres años en dicho parque, denegar la autorización que se solicita para colocar más molinos gigantes en Cabanillas I, valorando el impacto como crítico o de alta magnitud y declarando incompatible la existencia de un parque eólico con la conservación del buitre leonado.
Les dejo aquí el enlace del B.O.N en que aparece la valoración hecha en su día por el Gobierno de Navarra: bon.navarra.es/es/anuncio/-/texto/2018/28/14
