Opinión

Toc, toc

Toc, toc, llaman a la puerta. Abro y no conozco a quien está al otro lado. Pero empieza a hablar, es muy simpático y acabo firmando un papel. En Irache hemos recibido en los últimos meses varios casos de ventas abusivas a domicilio en las que algunos afectados se pueden ver implicados en deudas de miles de euros. 

Los productos que se venden mediante esta técnica son muy variados y van desde libros y enciclopedias, colchones, productos de relax o instrumentos de cocina. 

Los agentes buscan especialmente a personas mayores, más confiadas, para conseguir ventas. En muchas ocasiones los comerciales afirman que estos artículos tienen propiedades para la salud personal o la higiene. No suelen ser muy concretos con el precio final. Es habitual que en una visita no se venda solo un producto, sino varios.

En muchas ocasiones las formas de contratar las ventas son más que dudosas. Así se han vendido lotes de más de tres mil euros a personas en tratamiento psicológico o se han ofrecido como regalos productos de pago. 

En algunas ocasiones, son los hijos u otros familiares los que acuden a Irache porque se han dado cuenta del coste de la compra que han aceptado sus padres u otros familiares de edad. 

En estas visitas a domicilio no solicitadas previamente por el consumidor este tiene treinta días naturales desde que recibe el producto para echarse atrás. Debe dirigirse de forma fehaciente a la empresa para comunicar que ejerce este derecho y desistir del contrato de forma “inequívoca”. El vendedor debe facilitar al consumidor una copia en papel -o en otro soporte duradero, si lo acepta- del contrato firmado. 

Pautas ante la visita de un comercial

  • Si abre la puerta, no firme nada.
  • Exija que la persona se identifique.
  • No facilite ningún dato ni documento personal. Mucho menos datos bancarios.
  • Si se siente presionado, cierre la puerta.
  • Si un producto le puede interesar, exija la información y las condiciones de la oferta en papel. Pero nunca firme nada.
  • Asesórese posteriormente con la información facilitada antes de tomar una decisión.
  • Si usted ha firmado algo, busque orientación legal cuanto antes. Ante la duda, sepa que tiene treinta días desde que recibe el producto para echarse atrás.

Más información en consumidoresirache.com