Alfonso Del Álamo Alonso, responsable en Tudela de ADONA, la Asociación de Donantes de Sangre de Navarra, quiso celebrar a su manera, en clave local, la cita anual que agrupa en torno a una pequeña fiesta en cada localidad a los donantes de sangre, ya que este año la cita sólo tuvo lugar, exclusivamente, en Pamplona, en Baluarte, el pasado 31 de octubre, día en el que se puso en valor el acto de la donación y se reconoció este acto altruista a las personas que ya habían alcanzado, a lo largo de 2020 y 2021, las 25, 50, 100 y hasta incluso 150 donaciones, respectivamente.
Por ello, en un improvisado encuentro, hizo posar en el quiosco de la plaza de los Fueros a unos cuantos donantes homenajeados ya en Baluarte, recordando así un encuentro local que lleva dos años sin celebrarse, pero para el que quiso hacer este guiño, también antes de Navidad, para recordar que siempre, hasta en estas fechas y en verano, y en Fiestas, es necesario seguir buscando nuevos donantes de sangre, -que cada donante haga otro, se decían antes como eslogan de la Asociación-, y también para recordar que, día a día, se necesita que se sigan produciendo donaciones de sangre para atender las necesidades de este rojo líquido elemento insustituible e infabricable, al menos de momento, y casi mejor que siga siendo así, por pura humanidad.
“Quería entregar las insignias y hacer un pequeño homenaje a los donantes”, explicó en el improvisado encuentro, “que para eso os lo merecéis”, dijo. “Entonces, lo primero, es un agradecimiento general a todos los donantes por el buen comportamiento que ha habido durante este año y, como todos sabemos, las dificultades que ha habido. Pero la verdad es que vamos muy bien”, destacó. “Mi más cordial enhorabuena a los que habéis superado 25, 50, 100 y 150, que en realidad vosotros sois la representación de todos”, recordó Del Álamo. “Lo que necesitamos es más donantes. Sabéis que los resultados que estamos consiguiendo es a base de trabajo del equipo sanitario que tenemos en el centro de la calle Eza”, aseguró. “Y lo ideal sería que fuéramos muchos más, con el fin de que no hubieran estado llamando a la gente y hubiera el stock suficiente en el Banco de Sangre para todos nuestros centros hospitalarios”, dijo en este encuentro improvisado.
“En 2020 hubo 1986 donaciones”. En cuanto a aféresis, “se recogieron 400 bolsas en 2020, 590 en lo que llevamos de 2021, 150 bolsas más en el centro este que abarca los de Tudela. Y también vienen aquí a donar otros vecinos de la Ribera”, enumeró. “Donantes nuevos hubo 173 en el 2020 y llevamos 187 en el 2021. Además, con la particularidad de que no ha sido rechazado ninguno. Tras el estudio médico han pasado a donar”, reconoció. “Los resultados son estupendos, pero siempre tenemos que hacer un llamamiento a que haya más donante”, concluyó.
¿Por qué se dona sangre?
Así, hablamos con algunos de estos donantes convocados a esta cita local. Y así respondieron, a la pregunta de porqué donan sangre. “Es porque la sangre no se fabrica. Lógicamente, casi es como por quedarte tú más tranquila de que haces algo por los demás. Y es que es algo que no cuesta nada. Por ejemplo, a las mujeres si no haces aféresis te dejan donar 4 veces al año, 3 veces al año... Cuenta: bajas, vienes y, si almuerzas, son 3 horas al año de dedicación. Es que me parece que es súper sencillo, pero la gente no prueba. Yo tengo la suerte de que he dado ejemplo a mi hija, por ejemplo, y me siento súper orgullosa. Y mi hija a su marido, pero es difícil. Yo creo que tendrían que probar una vez y ver que es súper sencillo ponerte una nota en el ordenador de que dentro de 4 meses tienes que ir a donar. Es fácil, fácil. Y luego es que en el Banco de Sangre de la calle Eza es súper agradable estar porque esta gente te trata muy bien. Te dan de almorzar y te tomas un café y les cuentas la vida, te sientas ahí y parece como que es un poco de terapia. Se necesita gente un poco más colaboradora, pero que no cuesta mucho, la verdad. Yo les agradezco a ellos todo lo que hacen también por nosotros, porque al final te vas súper satisfecha”, destaca Rosa María Pérez Ostiz de Tudela.
“Simplemente vienes a donar, porque la sangre, en teoría, no te sobra, pero tampoco te falta. Y como se regenera en poco tiempo, sin problema. Y yo me encuentro mejor desde que soy donante de sangre. Me encuentro mejor de salud que antes. Y vienes aquí, te tratan con cariño. Es todo amabilidad y no hay ningún problema. Yo, además, soy constante. Vengo cada tres meses. Hay veces que hasta me adelanto un par de días y me lo dicen aquí en el centro. Sí, porque más o menos lo tengo como algo regular. Ya llevo 104 donaciones con la del otro día que vine. Y mientras pueda seguiré viniendo”, indicó Javier Serrano Lorente, de Tudela.
“Yo pienso que hay que ser solidario y no cuesta ningún trabajo donar sangre. No sé por dónde leí por ahí, pero es que es así, ‘treinta minutos de tu vida y es que salvas otra’. Puedes salvar otra vida sólo por treinta minutos de la tuya, viniendo a donar una sangre que en un momento dado hace falta. Y yo creo que está bien. Hay que ser empático. Y tú piensa si yo me encuentro en un accidente, me gustaría tener sangre cuando yo estuviese en esta situación en un hospital. Yo creo que con eso sobra. Aparte, la verdad es que nos tratan muy bien aquí, como han dicho mis compañeros. Llevo 50 donaciones”, dijo Juana Urbano Millán, natural de Jaén, pero vecina de Tudela desde hace muchos años.
“Yo también llevo 50 y la verdad es que no cuesta nada. Tengo un amigo, el Guti, que se dio cuenta de lo que representa donar porque cuando estaba su padre malico le metieron varias bolsas de sangre y se dijo y se dio cuenta de que hasta que no lo necesitas no te das cuenta de la labor humanitaria, filantrópica y altruista que se realiza con el sencillo ritual que se produce cada varios meses en el acto de donar sangre. Carmelo Blanco, el médico del Banco de Sangre, me ha dicho que done cada algún mes más, ya que me dan bajones de hierro, pero mientras pueda y esté sano, seguiré viniendo a donar. ¿Qué menos más sencillo se puede hacer por los demás?”, indicó Mariano Navarro Lacarra, de Tudela.
Más información en el teléfono 848 421 991 o en la sede de Adona en Tudela (calle Eza 2) en en siguiente horario 8:15-13:45h. (L-V) y 17-20h. (M y J).
