La belleza del arte en el cuerpo

1210752729.jpg

Los tatuajes han pasado de ser una moda o una actitud a convertirse en un complemento de belleza para el cuerpo, sobre todo, en el caso de las chicas, principales clientes de los tatuadores en la actualidad, aunque seguidas muy de cerca por los chicos.Mientras ellos los prefieren de tamaños más grandes y en partes del cuerpo más a la vista, las féminas son más discretas en ambas elecciones. Así lo atestigua el turiasonense Javier Martínez, dueño del salón de tatuajes “Metrópolis” en la ciudad aragonesa, y muy al tanto de la últimas tendencias. Basándose en los gustos de sus clientes, Martínez reveló que los signos tribales y los nombres con letras góticas o de otro tipo son en la actualidad los más demandados. En cuanto a las zonas preferidas, mientras los chicos eligen los brazos, la espalda y el pecho, y los tatuajes de mayor dimensión, las chicas son más discretas y se deciden por zonas más ocultas a la vista tales como el pecho, las ingles o los riñones.

Lo que determina que un tatuaje sea o no permanente es la habilidad del tatuador con la aguja y la tinta. Y es que las células no se regeneran a la profundidad de la piel donde queda inyectada la tinta.Un profesional sabe hasta dónde clavar la aguja. Si se queda corto, el tatuaje se volverá borroso, y si la profundidad es excesiva, causará mucho dolor y sangrado.Además, es conveniente asegurarse de que el profesional elegido cuida al máximo a sus clientes y se adapta a la normativa en lo que a medidas higiénico sanitarias se refiere. “Cada Comunidad exige unas normas. Nosotros tenemos que hacer un curso de Higiene y Sanitario, adecuar nuestro local y usar material desechable. Eso es algo primordial”, explica Martínez.

Tatuajes semipermanentes

En relación al trabajo, que no deja de ser una obra de arte que los profesionales plasman para siempre en la piel, Javier Martínez destaca la importancia de un correcto mantenimiento, una vez hecho el tatuaje. “Los doce primeros días no se puede tomar el sol, ni bañarse en la piscina porque es el periodo en que se lleva a cabo la cicatrización. Y tres veces al día hay que darse una crema cicatrizante”, comentó.

El tiempo medio para realizar un buen tatuaje depende del tamaño y dibujo elegido, pero este profesional turiasonense calcula que “hacer uno pequeño puede costarme una hora más o menos. Y tatuar todo un hombro, unas 3 horas”. Y en cuanto al precio, éste no baja de los 70 euros.

En los últimos tiempos, los salones de estética les han hecho cierta competencia a los profesionales del tatuaje de toda la vida porque, a partir de las máquinas que se usan en la micropigmentación de labios o cejas, las esteticistas realizan también ciertos tipos de tatuajes. La condición, tal y como explica Laura Enériz, del Centro Venus, de Ablitas,”es que tienen que ser pequeñitos porque la máquina es pequeña”. La mayor parte de los clientes optan también por los símbolos y dibujos tribales y su precio oscila entre los 80 y los 150 euros”.