Tarazona

Tarazona, Teruel y Calatayud se alían para impulsar el tramo aragonés del Camino de la Vera Cruz

Las tres localidades acordaron las bases para crear la Asociación de Municipios Aragoneses del Camino de la Vera Cruz y reforzar su legado compartido.

Reunión mantenida por el alcalde de Tarazona, Luis José Arrechea, junto a la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, y el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, acompañados todos ellos por sus respectivos equipos
photo_camera Reunión mantenida por el alcalde de Tarazona, Luis José Arrechea, junto a la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, y el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, acompañados todos ellos por sus respectivos equipos

La Asociación de Municipios Aragoneses del Camino de la Vera Cruz, apoyada por las ciudades de Tarazona, Teruel y Calatayud, será una realidad en las próximas semanas. Así se puso de manifiesto tras la reunión que mantuvieron el alcalde de Tarazona, Luis José Arrechea, celebrada el 19 de febrero en Teruel junto a su alcaldesa, Emma Buj, y el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, acompañados todos ellos por sus respectivos equipos. 

El Camino de la Vera Cruz es un patrimonio compartido por cinco Comunidades Autónomas –Navarra, Aragón, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Murcia– y la creación de una institución que reúna a todos los municipios aragoneses por los que discurre ayudará a afianzarlo como destino turístico y cultural de referencia.

El objetivo es que la Asociación esté constituida cuanto antes y en 2024 funcione a pleno rendimiento, coincidiendo con el año jubilar para la ciudad de Caravaca de la Cruz, en Murcia, donde culmina el Camino. 

El Camino de la Vera Cruz en Aragón se presenta como una oportunidad para gestionar de forma estratégica el patrimonio cultural, religioso y gastronómico que rodea el recorrido, un proyecto susceptible de captar fondos europeos para su impulso gracias, por ejemplo, a las iniciativas de turismo sostenible. La futura Asociación pretende coordinar las sinergias que conviven alrededor del Camino y convertirlo en una palanca que reactive las economías locales con la creación de puestos de trabajo que contribuyan en la lucha contra la despoblación.