Opinión

Tres objetivos que nos unen: Promover el Acuerdo

El sábado 30 de septiembre representantes de los Foros Locales y colaboradores de Lokarri

celebraron un encuentro para debatir y aprobar el plan de actuación de esta Red ciudadana por el

acuerdo y la consulta de cara al curso 2006-2007.

El plan de trabajo que hemos diseñado parte de una premisa básica. Hoy nos encontramos en

pleno desarrollo de un proceso de paz y normalización. Hemos llegado a esta situación después de

muchos años de violencia, enfrentamiento y crispación que han sido superados, esperamos que de

manera irreversible, gracias a las voluntades sociales mayoritarias de no violencia y diálogo sin

exclusiones. El primer paso ya se ha dado, y ahora nos enfrentamos al reto de desarrollar y culminar

con éxito el proceso emprendido.

En opinión de Lokarri los objetivos de este proceso son: 1) lograr un acuerdo plural, 2) que sea

sometido a una consulta popular, y 3) que permita iniciar un proceso de reconciliación social. Estas

tres metas (acuerdo, consulta y reconciliación) son las que deben guiar este proceso de paz y

normalización. En este sentido, es necesario sumar voluntades políticas y sociales que empujen y

contribuyan en la consecución de estos objetivos. Si compartimos los objetivos podremos trabajar de

manera conjunta para superar los obstáculos a los que se tiene que enfrentar el proceso de paz y

conseguiremos crear las condiciones de conciliación que tanto necesita nuestra sociedad.

Promover el Acuerdo

Estos son los tres retos a medio plazo. El primer paso para alcanzar estos objetivos es lograr un

acuerdo sobre el acuerdo, poner en marcha las conversaciones sobre las conversaciones, que permitan

definir los principios, compromisos, metodología, calendario y agenda de la mesa de partidos, espacio

en el que las fuerzas políticas deben trabajar para llegar al acuerdo. Es necesario que este diálogo para

llegar a un primer acuerdo sobre el método sea discreto y en él deben ser partícipes todas las fuerzas

políticas.

Precisamente, Lokarri se ha propuesto difundir social y políticamente los objetivos de este

proceso. Por encima de las diferentes estrategias hay una mayoría social que apuesta por el acuerdo, la

consulta y la reconciliación como grandes objetivos del proceso de paz. Son tres objetivos que nos

unen como sociedad y desde Lokarri queremos contribuir para que sean una realidad lo antes posible.

Así, desde ahora hasta verano de 2007 dedicaremos un trimestre de nuestra actividad a cada

uno de estos tres objetivos: el otoño al acuerdo, el invierno a la consulta y la primavera a la

reconciliación. Concretamente, cada trimestre prepararemos las siguientes actividades: 1) la edición

de una publicación dedicada a cada uno de los objetivos, 2) una iniciativa de debate y participación, y

3) una movilización en la que reivindicar el acuerdo, la consulta y la reconciliación.

Actividades de Lokarri para promover el Acuerdo

El otoño de 2006 lo dedicaremos a promover el acuerdo. Queremos difundir y reivindicar el

acuerdo plural, inclusivo, un acuerdo con el que todos ganemos, y en el que se establezcan los

principios básicos de nuestra convivencia y su traslado al ordenamiento jurídico.

– Un acuerdo plural, en el que estén representadas las distintas tradiciones sociopolíticas

presentes en nuestra sociedad. Hay que sumar esfuerzos para que el acuerdo sea unánime, y

en el caso de que no sea posible, para que el acuerdo sea transversal. En último caso, si el

acuerdo no puede ser unánime ni transversal deberá ser la propia ciudadanía la que sea

consultada para resolver el bloqueo.

– Un acuerdo inclusivo, un acuerdo abierto a la participación de todos, y que permita la

incorporación futura de aquellos que no lo suscriban en un primer momento

– Un acuerdo con el que todos ganemos. El acuerdo no debe suponer la derrota de nadie,

debe ser la victoria de todos, la victoria del pluralismo, de la igualdad y de los principios

democráticos. El acuerdo que queremos es aquel en el que todos nos sintamos vencedores y

nadie considere que ha sido derrotado.

– Un acuerdo que establezca los principios básicos de nuestra convivencia, que permita

gestionar aquello que nos separa y aquello que nos une de una manera pacífica y

democrática, no repitiendo los errores del pasado.

– Además, este acuerdo sobre principios deberá ser recogido en el ordenamiento jurídico,

para que el acuerdo no se convierta en una mera declaración de intenciones, y para que

tenga fuerza de ley.

El camino para lograr este acuerdo está señalado por la no violencia y el diálogo sin

exclusiones. La mesa de partidos y la participación ciudadana son las dos recetas que nos permitirán

alcanzar este acuerdo. Por tanto, el momento actual exige que se den pasos para que todos los

derechos humanos de todas las personas sean respetados, para que todas las fuerzas políticas puedan

participar en condiciones de igualdad, para que se cree la mesa de partidos y para crear espacios de

participación ciudadana en el proceso de paz.