Vista la decisión del Consejo Político de UPN se puede ahora decir muy clarito que el debate constitucionalistas españoles y constitucionalistas navarros no le conviene al PP. En este debate solo salen beneficiados UPN y PSOE por intereses contrapuestos. Mientras UPN lo hace y lo hizo suyo desde el nacimiento de la UCD para mantener el poder de la derecha más cavernícola de Europa en Nafarroa y salvar a España del separatismo rojo-masónico, el PSOE desarrolla este mismo discurso en su política Navarra desde los años de Urralburu para ocupar poltronas en Navarra y para mantener al PSOE en Madrid.
El PSOE de Zapatero ha tenido en las negociaciones de Loiola la oportunidad de barrer con intereses partidistas y dar solución al conflicto político que sufre Navarra, Euskal Herria y el Estado Español. La opción de desarrollar y ampliar los Acuerdos de Loiola al conjunto de fuerzas políticas del País y por lo tanto al PP debería ser ahora un elemento a tener muy en cuenta de cara a resolver definitivamente este doloroso conflicto ya que para modificar la correlación de fuerzas a nivel del Estado, Navarra para el PP, ya no es tan imprescindible. El PP en una convocatoria de Elecciones Generales podría obtener Diputados propios navarros y no de UPN, como en su día tuvo la UCD, si saben jugar a ese centrismo modernista al que ahora juega el PSOE , que no de izquierdas.
Los que nos sentimos únicamente constitucionalistas navarros estaríamos dispuestos , siempre hemos estado dispuestos, a abordar un proceso de entendimiento con los que se sienten únicamente constitucionalistas españoles para que las dos realidades tuvieran posibilidad jurídica e institucional en el juego democrático.
Si la ciudadanía tuviera la opción de decidir en Navarra, ya que los navarros no hemos votado ni el Amejoramiento, estoy seguro de que apostaría por sumarse a un Acuerdo Político para superar el conflicto político en el que las dos realidades constitucionalistas, española y navarra, saldrían beneficiadas.
