La Casa del Almirante, edificio palaciego renacentista, de la primera mitad del siglo XVI, es uno de los edificios más emblemáticos del casco antiguo de Tudela, que sin duda se convertirá, junto con la Catedral, en uno de los mayores polos de atracción turística cultural y monumental, que posee nuestra querida Tudela. Ubicada en la calle Rúa, eje transversal de los más importantes monumentos y palacios que conforman nuestro patrimonio histórico, tiene por tanto, una clara vocación peatonal.
Desde la plaza de San Jaime (con el Palacio Decanal como su máximo exponente), hasta la plaza de San Nicolás (con la Iglesia de San Nicolás de Bari, donde recibió sepultura el Rey navarro Sancho VII El Fuerte), la calle Rúa ha sido testigo principal de la historia de Tudela.
Desde la Asociación de Vecinos del Casco Viejo de Tudela, pedimos al Ayuntamiento de Tudela, la peatonalización progresiva de nuestro Conjunto Histórico, como una continuidad natural, del proceso de peatonalización ya iniciado actualmente.
Esto nos permitirá, identificarnos más si cabe, con nuestro entrañable “Casco Viejo”. Redescubrir nuestras calles o plazas, desde el sosiego y la tranquilidad que un entorno peatonal nos ofrece, sin estar rodeado de coches mal aparcados o que pasan a toda velocidad por calles estrechas.
La peatonalización convertirá al casco antiguo, en un punto de atracción y de encuentro, lo cual llama al negocio y las empresas lo detectan rápidamente, tendiendo a instalarse en la zona y generando dinamismo comercial.
Reforzará las actividades comerciales y turísticas ya existentes o futuras, revitalizando la zona y haciéndola más atractiva, tanto para los tudelanos y tudelanas como para el turismo en general.
Contribuirá a potenciar los recursos patrimoniales históricos y artísticos de que dispone el casco antiguo, convirtiéndolos en un sector de desarrollo y crecimiento económico para la ciudad.
La peatonalización del casco antiguo de Tudela, sin embargo, debe ir acompañada, de un estudio riguroso destinado a la creación de áreas de aparcamiento para residentes y comerciantes de la zona, dentro del propio casco antiguo, así como de aparcamientos periféricos para el resto de ciudadanos y ciudadanas, que permitan acercarlos al casco antiguo, ayudando a incrementar la actividad económica y cultural del mismo.
