Opinión

IZQ-EZK sobre la sentencia de la Champiñonera y otras

Tal como ya manifestamos en la Comisión de Urbanismo y en Junta de Gobierno tras conocerse la sentencia, nuestro grupo considera que este conjunto de sentencias negativas para el Ayuntamiento y que recaen sobre el fisco ciudadano, exigen que el Gobierno Municipal rinda cuentas sobre la gestión que ha llevado a dichas sentencias. No nos sirve de consuelo que se nos informe acerca de otras sentencias pendientes en las que tengamos mejores perspectivas. Son aquellos contenciosos que perdemos, los que ocupan el centro de nuestra preocupación.

No es de recibo que siempre se eche toda la culpa de la sentencia al desconocimiento o errores del perito judicial o del juez. Al margen de que la Justicia pueda tener sus errores, alguna responsabilidad habrá en el equipo de gobierno municipal, y es esa responsabilidad la que debe dilucidar el Ayuntamiento. Hablamos de litigios de índole diferente: si hace poco era un problema de gestión en el caso de las piscinas cubiertas, ahora es de urbanismo en la construcción de un parque. El Alcalde, y su equipo de gobierno, deben analizar dónde radican las causas de estos errores de gestión y proyecto, que en pocas semanas le van a costar cerca de un millón de euros a las y los ciudadanos de Tudela, a la par que se les suben impuestos por encima del IPC y se les recortan servicios. En ese análisis tienen que contemplarse todas las variantes técnicas, jurídicas y políticas que puedan incidir en las responsabilidades a que hubiera lugar, han de rendirse cuentas de tales observaciones y dirimir las responsabilidades pertinentes.



En el caso concreto del Parque de la Champiñonera, la portavoz de nuestro grupo municipal, desde la portavocía que ejercía en ese momento, denunció desde el primer día que no era adecuado gastarse tanto dinero en un parque construido sobre una champiñonera, y que podría dar problemas. No somos profetas, solo usamos el sentido común del que parece carecer el equipo de gobierno.