Si digo esto es porque a partir de ahora surgirán más peticiones para aprender otras religiones que actualmente se practican en España, y como es natural con los mismos derechos. Por esa razón, creo que ha llegado el momento de hablar claro y decir las cosas por su nombre.
Religión no hay más que una, que es la ley de DIOS, que la entregó a Moisés en el monte Sinaí, escrita a fuego sobre la piedra y que siempre la hemos conocido como los DIEZ MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS.
A lo largo de la historia y en los cinco continentes, la Ley de Dios se ha enseñado y se ha interpretado como se ha querido a favor de los que en aquel momento ejercían el poder, y cuyas consecuencias se están viendo en estos tiempos.
Dentro de estas religiones, se han cometido errores, incluyendo la católica, por lo que el Papa PABLO VI, públicamente pidió perdón por dichos errores, y que ningún otro representante del resto de religiones haya efectuado hasta el momento.
El actual Papa FRANCISCO y otros anteriores, llevan tiempos queriendo acercar posturas en cuanto a la unificación de la religión que Dios nos dio para todos los habitantes del planeta tierra, de forma que todos juntos y unidos como hermanos actuemos en esta vida, siendo este el mensaje de Dios nos envió.
Todos debemos de saber que Dios es uno y único para todos, aunque después los hombres y mujeres queramos ponerle o denominarlo con nombres diferentes, pero el a todos nos entiende, nos escucha y nos indica el camino para obtener nuestra salvación.
Con este pequeño escrito, solo pretendo a los políticos de Navarra y de España, que en estos casos actúen con cautela y sensatez, para evitar odios y rencores ya que debe primar la unión, la comprensión y colaboración entre todas las religiones, pues la madre de todas es la Ley de Dios, cosa que todos deseamos.
Quiera Dios que algún día salga a la luz el Arca de la Alianza, que contiene la tabla de los Diez Mandamientos, para que el mundo puede ver con sus ojos y creer lo que dice.
