Los trastornos psicológicos en los niños

Los niños y los adolescentes también sufren a menudo diversos trastornos psicológicos, que deben ser tratados de forma adecuada por especialistas

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Cada vez existe una mayor preocupación por parte de los padres y de la sociedad en general, de la salud psicológica en la infancia. Son muchos los niños y adolescentes que muestran ciertos problemas de distinto tipo, de conducta, para relacionarse, de agresividad, problemas emocionales, etc. Por ello, la figura de los psicólogos especialistas en niños tiene una gran importancia para un adecuado desarrollo en la infancia.

Casi todos los trastornos psicológicos de una persona adulta, pueden empezar a manifestarse a edades tempranas, aunque la forma de manifestarse normalmente es diferente en los niños y en los adultos, por lo que es importante que se trate de forma específica, individualizada y única en cada caso concreto.

La evaluación y el diagnóstico en la infancia

La evaluación y el diagnóstico psicológico infantil tiene ciertas peculiaridades, que dependen de la edad del niño, del nivel de madurez y del tipo de problema que presenta.

En un primer momento, cuando el niño es derivado a una consulta psicológica, se comienza con la evaluación infantil; el niño o el adolescente y sus padres son entrevistados, con el fin de conocer información sobre diversos aspectos del niño, su desarrollo, su contexto, los antecedentes familiares, etc. Los datos que se obtienen en la entrevista se complementan con otras pruebas, como test y cuestionarios. Todo ello, tiene la finalidad de llegar a un diagnóstico lo más preciso posible. De esta forma, se podrá aplicar el tratamiento o los tratamientos más adecuados para el menor.

El niño y el adolescente tiene ciertas peculiaridades, que es conveniente que el psicólogo infantil conozca de forma detallada, especialmente su desarrollo evolutivo. Dependiendo de cada caso particular, se debe establecer un diagnóstico y un tratamiento individualizados y fijar un modo de trabajo propio.

Los trastornos psicológicos y emocionales más frecuentes en los niños

Existen determinados trastornos y problemas emocionales que se suelen iniciar de forma más frecuente en la infancia y en la adolescencia. A continuación, describimos los más frecuentes, encuadrados en distintas categorías diagnósticas.

Trastornos del aprendizaje. Los trastornos del aprendizaje son característicos en la edad infantil. Implican un rendimiento académico más bajo del que se espera según su edad en diferentes áreas, sin que exista retraso mental. Algunos de los trastornos que se dan con mayor frecuencia, son la dislexia, la discalculia o los problemas con la expresión escrita.

Los trastornos de ansiedad infantil también se producen con bastante frecuencia en un gran número de niños y de adolescentes. De hecho, la ansiedad infantil es el problema más tratado en la clínica infantil. Las emociones, como el miedo o la ansiedad, son perfectamente normales en el desarrollo de cualquier persona, aunque en muchas ocasiones, pueden llegar a aparecer de un modo patológico, de forma que interfieren en el desarrollo y en el día a día del menor, por lo que sería necesario actuar cuanto antes. Algunos de los trastornos de ansiedad que pueden aparecer en los niños son, la fobia a la escuela, la ansiedad de separación, la fobia social, y el trastorno obsesivo compulsivo, entre otros.

Los trastornos generalizados del desarrollo se caracterizan por déficits en diferentes áreas, como en la comunicación o la interacción social, así como por la presencia de ciertos comportamientos estereotipados, y, en ocasiones, por retraso mental. Algunos cuadros psicológicos que se incluyen en este grupo, son el trastorno autista, el trastorno de Rett, el trastorno de Asperger, que se suele producir más tardíamente que el trastorno autista, o la esquizofrenia infantil.

El retraso mental tiene su inicio en la infancia, antes de los 18 años. Está caracterizado por una capacidad intelectual por debajo de la media, es decir, un coeficiente intelectual por debajo de 70, así como por algunas deficiencias en el comportamiento, que se dan de forma no adaptativa.

Los trastornos de la conducta y el comportamiento en los niños es otro de los problemas a los que más se enfrentan los psicólogos especializados en la infancia.

El trastorno de conducta en la infancia o trastorno disocial, se puede ver en la persistencia de ciertas conductas que vulneran los derechos de otras personas o las normas sociales. Algunos signos son la destrucción de bienes ajenos o el robo, la agresión hacia otras personas o animales o la violación de forma grave de las normas impuestas por la familia o por la sociedad. Este trastorno se inicia normalmente entre los 6 y los 9 años y se da con mayor frecuencia en niños.

El trastorno por déficit de atención e hiperactividad es uno de los trastornos más diagnosticados en la infancia. Se caracteriza por la dificultad para mantener la atención, por hiperactividad o un movimiento excesivo y por un déficit en el control de los impulsos.