Si has decidido a cruzar el charco próximamente, hay algunas cosas que debes saber antes de viajar a los Estados Unidos. ¡Te las contamos!
Antes de volar
Ten en cuenta estos aspectos antes de volar al país norteamericano.
1. Solicita la visa o permiso correspondiente
Es importante que los viajeros conozcan los requisitos para entrar a los Estados Unidos.
El ESTA es un permiso para ciudadanos de ciertos países, como los de España, que permite ingresar a los EE. UU. con fines turísticos por hasta 90 días sin visa.
Sin embargo, para estancias más largas o cuando no se es elegible para tramitar el ESTA, es necesario obtener una visa para Estados Unidos y cumplir con los diferentes requisitos del visado (más información).
2. Asegúrate de que tu pasaporte está en vigor
La mayoría de los viajeros que vuelan a los EE. UU., como los españoles, deben tener un pasaporte con al menos 6 meses de validez.
Como esta situación puede cambiar por diferentes razones, lo mejor es comprobar la web del Ministerio de Asuntos Exteriores para tener la información más actualizada.
3. Compra un candado aprobado por la TSA
Cuando viaja a Estados Unidos, la Administración de Seguridad del Transporte (TSA) hace cumplir estrictas pautas de equipaje para la seguridad y la protección.
Todas las maletas se revisan y, si los inspectores de la TSA consideran que una maleta debe inspeccionarse físicamente, se les permite romper el candado y abrir una maleta.
Para evitar perder un candado, lo mejor es utilizar uno aprobado por la TSA, ya que se pueden abrir con una llave maestra.
4. Conoce la normativa de tránsito
Si tiene un vuelo internacional que transita por los EE. UU. (particularmente común con vuelos a Canadá o América del Sur), deberás pasar por la Aduana de los EE. UU.
Técnicamente, no hay 'tránsito' en Estados Unidos, ya que todos los pasajeros deben desembarcar y pasar por inmigración y aduanas.
Esto significa cumplir con los requisitos de visa o permiso de entrada para los Estados Unidos, incluso si solo te quedas por un par de horas entre vuelos internacionales y tu equipaje va directo a tu destino final.
Una vez llegues a Estados Unidos
Ahora 4 consejos para cuando aterrices en el país norteamericano.
5. Reserva tu traslado al aeropuerto
Independientemente de que aterrices en Nueva York, Los Ángeles o Chicago, un traslado privado es una excelente manera de llegar desde el aeropuerto a tu destino.
La infraestructura de transporte público a menudo es limitada en los Estados Unidos y las carreteras pueden estar muy concurridas, difíciles de transitar y pueden suponer un agobio para un visitante que no está acostumbrado.
Por esta razón, la forma más fácil de llegar a tu alojamiento es concertando previamente un medio de transporte para hacerte el traslado desde el aeropuerto.
6. Apaga tus datos móviles
Si eres un visitante internacional, no cometas el error de usar los datos de tu teléfono móvil mientras te encuentras en los EE. UU., a menos que tengas un plan móvil que lo permita.
Al igual que con los viajes a cualquier destino internacional, las tarifas de roaming de teléfonos móviles son muy caras. Aprovecha al máximo el Wifi gratuito, o consulta un plan de datos móviles para viajes internacionales.
7. Las propinas son prácticamente obligatorias
Aunque es una regla no escrita, se espera que dejes un 15-20% de propina en los restaurantes. ¿La razón? El salario mínimo es bajo en los Estados Unidos, por lo que las propinas son una parte importante de los ingresos de muchos trabajadores.
La propina también se aplica a otros ámbitos, como a los conductores de taxis o de servicios de traslado. Dar una propina del 10 al 15 % es bastante estándar para un traslado privado, a menos que ya se haya incluido un cargo por servicio.
8. Los impuestos rara vez están incluidos en las compras
Por lo general, las etiquetas de precios que ves no incluirán impuestos sobre las ventas. Una vez en caja, te dirán el precio final del producto que tendrás que abonar.
Ten esto presente a la hora de comprar en establecimientos y, en caso de dudas o presupuesto limitado, pregunta siempre para evitar sorpresas desagradables.
