Con siete espectáculos taurinos y las principales figuras del escalafón, la de Ejea se ha convertido en la segunda feria de Zaragoza y punto de encuentro de aficionados a la lidia de las zonas vecinas.
La difícil tarea de cerrar estos carteles es labor de Julián Caudevilla, un empresario de la localidad que desempeña esta tarea por afición desde hace más de dos décadas.
Asociación La Fura
Satisfecho por haber conseguido traer a todos los toreros que buscaba, Caudevilla nos comenta que: “ Hago lo que puedo, pero me gustaría que viniera más gente para ofrecer aún más y mejores corridas”.
Con el objetivo de defender y recuperar la Tauromaquía de la zona se creó hace unos meses la Asociación la Fura. Actualmente está integrada por seis miembros, quienes además de practicar saltos, quiebros, recortes, y figuras del toreo a la antigua usanza, se encargan de preparar a grupos de jóvenes para que aprendan estas artes. Este grupo ha sido el responsable de coordinar y seleccionar los llamados festejos taurinos menores para “ofrecer a los ejeanos toda la variedad de pequeños festejos que nos sea posible y hacerles disfrutar con estas artes que van cayendo en el olvido”, comenta Armando Sancho, uno de los integrantes de la asociación.
