El loro de curro
La lista de la compra
Curro está preocupado. Su loro, en cuanto lo sacan a la terraza, empieza a decir:
- ¡Presidente, cabrón, hijo de puta, muérete! ¡Presidente, cabrón, hijo de puta, muérete! ¡Presidente, cabrón, hijo de puta, muérete! y así día tras día...
Va a la pajarería para ver qué idea le dan para que el loro cambie esa costumbre. El de la pajarería le dice que lo mejor y más rápido es ponerle cerca un loro bien hablado, fino y que no diga esas cosas.
- ¿Conoce alguno?
- Si, el de D. Luis el párroco es un santo.
Le cuenta el caso a D. Luis el párroco, que le deja su loro bien hablado.
Pasan unos días y Curro más preocupado aún vuelve a la pajarería.
- ¿Mejoró su lenguaje el lorito?
- Mejorarlo... ¡Ahora es peor! Se pasa el día diciendo ¡Presidente, cabrón, hijo de puta, muérete! y el del cura le contesta:
¡Te lo pedimos, Señor!
Tú qué prefieres
Iba una mujer santiguándose por la calle y se encuentra a una amiga que le dice: Pero María ¿Desde cuándo eres tú tan religiosa? Es que me estoy acordando de la lista de la compra: cabeza de ajo, 2 melones y estropajo.
Tú que prefieres, ¿tener cuernos o tener colesterol?
Anda tú, pues tener cuernos que puedes comer de todo.