Opinión

Los peligros de la Propaganda Política

Con estos días de frío que hemos tenido últimamente no apetece en absoluto salir a la calle, lo que suele ser beneficioso, porque gracias al aburrimiento uno termina haciendo cosas que de normal no haría. En una de esas tardes de manta y teléfono en mano me dio por investigar sobre lo que el economista Jesús Huerta de Soto comentaba sobre el mundo del marketing y la publicidad.

Inmerso en aquellos vídeos y ponencias me resultó fascinante como el profesor desglosaba las virtudes del marketing para las empresas y lo intrincado de ese mundillo, hasta que súbitamente llegó al análisis de las campañas de publicidad de las instituciones públicas, lo que el denominaba ‘’Propaganda Política’’. Las conclusiones de las disertaciones del profesor Huerta de Soto eran francamente interesantes. La propaganda pública es el único tipo de publicidad en el que varios factores que de normal están presentes cuando una empresa realiza una campaña desaparecen, en la “propaganda política’’ da igual si el resultado de la campaña es positivo o no, porque paga el contribuyente, también da igual si a los clientes les gusta el resultado o no, porque no existe una relación de compra venta (mas bien de extorsión) entre contribuyente y entidad. Algo que saben todos los políticos porque se viene experimentado con este tipo de propaganda desde los tiempos de Goebbels (Ministro de propaganda del III Reich) , lo que nos lleva a una perversión del marketing en si mismo.