Opinión

Podríamos copiar

En la antigua república de Roma, en situaciones excepcionales como una guerra, se nombraba un dictador al que se le conferían amplios poderes para que sacase al país  del atolladero. Se le concedía un plazo limitado. Durante el imperio hubo situaciones internas graves, como la del ególatra Calígula que nombró cónsul a su caballo y cometió disparates y atrocidades. En tales casos, se utilizaron unas veces métodos sangrientos  y otras no sangrientos como los higos envenenados. Nosotros atravesamos por un lado una situación objetiva excepcional, la guerra contra el virus, la crisis sanitaria y la económica. Por otro, la grave situación interna creada por los independentistas y por el ególatra Calígula Sánchez, que nombró Vicepresidente a Iglesias, ha elegido gobernar  contentando, en pago de su apoyo, a los proetarras y golpistas que quieren liquidar a España, tiene en su haber unas pésimas cifras sanitarias y económicas en la pandemia, se burla de nosotros mintiéndonos con total desvergüenza, fomenta el guerracivilismo, ataca la independencia judicial etcétera. No pudiendo utilizar las antiguas soluciones romanas, habría que encontrar otra.

Los herederos actuales de la antigua Roma están en la misma guerra que nosotros, y a nivel sanitario, económico y sobre todo político están mejor. Como  si se hubieran inspirado en la antigua figura del dictador, allí los partidos han elegido a Mario Draghi, expresidentedel Banco Central europeo, y lo han nombrado presidente del Gobierno para que afronte la situación excepcional. Viene a ser una versión sui géneris del gobierno de  consenso. Han sido capaces de dejar a un lado sus diferencias e intereses particulares para anteponer el bien general. 

Aquí estamos mucho peor que ellos, así que se podría copiar su idea. Si se hiciera, los partidos nacionales darían ejemplo de generosidad y de patriotismo. Sería bueno para afrontar las crisis sanitaria, económica y política que padecemos. En cuanto a la política, podría darse desde el primer momento un mensaje claro a los independentistas: se acabó el juego, the game is over (como no les gusta el español ...). Nada de incumplir las leyes, nada de  inmersiones lingüísticas obligatorias ni de exclusiones del español, ni de libros manipulados y manipuladores, ni de referéndums ilegales, ni de declaraciones de independencia ni ... Para evitar suspicacias typical spanish, podrían ser dos los que copresidieran ese gobierno de emergencia, uno de derechas y otro de izquierdas. Un ejemplo: González y Aznar tienen experiencia y parecen en buena forma física y mental. Tendrían ocasión de prestar un servicio a España. Claro que antes habría que despejar el terreno político apartando a Calígula Sánchez del poder. Esa operación delicada la tendría que hacer el PSOE (¿los que en su momento lo echaron y los que queden -si quedan- que amen a España?). Si la hiciera pagaría la deuda que tiene contraída con la nación por haber permitido a Sánchez adueñarse del partido, llegar a donde ha llegado y hacer lo que ha hecho. Pero los partidos nacionales no están a la altura y nada parecido a lo anterior ocurrirá. Habrá que esperar a las elecciones a ver si se produce el milagro. Es verdad que el futuro no está escrito y que a veces la historia sorprende y ocurren cosas que no parecían posibles, pero las fuerzas que nos llevan hacia la destrucción están gobernando el país y nuestro futuro, que ya tenía mala pinta, con Calígula se vislumbra negro.