Nuevamente desde el Estado, desde la Admi-nistración, se anima a la ciudadanía a ser y actuar como un policía más. Esta vez, amparándose en el real e ilegítimo fraude del paro.
Al parecer, el establishment estatal carece de herramientas y miembros suficientes como para realizar su
propia función: gestionar, controlar
y garantizar el cumplimiento de las obligaciones colectivas y públicas.
Al menos eso se deduce de la última ocurrencia de la ministra de Empleo, Fátima Báñez, que ha anunciado que han habilitado una web (www.empleo.gob.es/itss/web/index.html) para potenciar las denuncias ciudadanas contra el empleo irregular
y el fraude a la Seguridad Social.
Desde luego que colectivamente se deben condenar esas prácticas, pero de ahí a promover el Gran Hermano colectivo de vigilancia y desconfianza va un trecho... ¡Porque se perjudica la convivencia!
