Es una pena ver en qué estado de conservación se encuentran los aledaños de la Glorieta Merindad de Estella del vial de Tudela y la zona contigua de la Cuesta de Loreto.
Así, tan abandonados y sucios, llenos de piedras y tierra, cuando venga una tormenta se van a colapsar esas calles y las aledañas.
¿No se podría mejorar el mantenimiento de las mismas? Reparar, mantener y cuidar es más barato que arreglar a posteriori...
Higinio Magaña