Opinión

Sorprendentes elecciones

Siempre he considerado que las elecciones no van conmigo, pero más me aferro a mi idea al ver las maniobras circenses que están haciendo algunos candidatos. Me explico: Los de familia de toda la vida de izquierdas, se presentan por la derecha, los progresistas de siempre, al centro, los “rojos”, se jalean entre ellos. ¡Mal asunto señores candidatos! Como no haya mejores alternativas o opciones, yo al no votar, SI, me da derecho a criticar a todos.

Los únicos perjudicados son los ciudadanos, y parto de la idea de que los que están no se quieren ir y los que no, quieren entrar como sea. Sepan señores candidatos, UN LÍDER POLÍTICO ES BUENO PARA SU PUEBLO, POR LOS SACRIFICIOS QUE ES CAPAZ DE HACER POR EL CIUDADANO.

Dónde quedaron los tiempos de mirar por el pueblo llano y hacer política con mayúsculas. EMILIO CASTELAR, MANUEL AZAÑA, e incluso JOSÉ ANTONIO PRIMO DE RIBERA. ¡Lástima!, fueron los últimos románticos en hacer política social.

Mi humilde pregunta es, ¿si la política fuera altruista, cuántos se presentarían?

Sabiendo de primera mano que no suelen presentarse los más capacitados, sino los que les interesa a los partidos, ¡PASEN Y VEAN!