Opinión

Sólo somos públicos

Llevamos casi 30 años de Democracia y parece que lo tenemos todo resuelto, y no es cierto, los ciudadanos seguimos siendo sólo público, actores ajenos a dar respuestas a las necesidades reales.

La política, los políticos y sus sermones y los partidos y sus intereses nos tienen tan bien engañados que realmente creemos que somos Libres: ¡Pobres ilusos! Hablan de Navarra, pero no dejan que sus ciudadanos expresemos nuestra voluntad. Hablan de Presupuestos Participativos pero no nos hacen llegar a casa las cuentas ni los proyectos para opinar sobre ellos. Eso sí, la Contribución Urbana, el Impuesto de Circulación de Vehículos, la Declaración de la Renta anual, eso sí que nos lo hacen llegar, -para recaudar-, claro. No esperan que pidamos o sugiramos, sólo que paguemos...

Sigue pendiente la reforma electoral que propicie unas Listas Abiertas en las que cada vecino vote directamente a su edil favorito, a esa persona que merece confianza y respeto, pero tras esos casi 30 años de “Democracia consolidada” no nos han dejado elegir ni siquiera el modelo de Estado que preferíamos tras el dictador, y así nos va, Ayuntamientos y Parlamentos están llenos de esgarramantas, mal preparados, absolutamente desinformados, fieles sólo a las sinergias de unas siglas que buscan cualquiera sabe qué objetivos... ¿Somos libres? No, somos esclavos de los argumentos, las falsas siglas y las consignas.