Opinión

Sobre el centro cultural de Tudela (UPyD)

Ante un hecho muy grave como es la posible desaparición de las arcas municipales de 12 millones de euros que el equipo de gobierno (o de desgobierno, como mejor se prefiera) UPN-PP debía destinar a la construcción del centro cultural, UPyD reclama saber si ese dinero se ha usado para otros propósitos. Si es así, queremos saber en qué decreto foral se autoriza el uso de ese dinero para otros fines y cuáles han sido. No sirve la excusa de que está en la caja única. No nos tomen el pelo, por favor, y dígannos la verdad.



No decimos nada nuevo, pero recordaremos que Tudela está inmersa en un plan de saneamiento que no le permite pedir nuevos créditos. No queremos pensar mal y esperamos que este dinero no haya sido una financiación encubierta del ayuntamiento, el cual ya debe más de 51 millones de euros, 1.446 euros por habitante y que hipoteca a los tudelanos por generaciones. Recordaremos que la deuda a bancos y cajas ha aumentado más de un 270%, a lo cual tendremos que sumar la posible devolución de esos 750.000 euros anuales.



Con una ciudad cada vez más sucia, peor iluminada, menos servicios al ciudadano, menos puestos de trabajo y cada vez más inmersa en la incertidumbre por el futuro, es una seria irresponsabilidad hipotecar el futuro de nuestros jóvenes en proyectos faraónicos de difícil mantenimiento después de su construcción, sirva de ejemplo el circuito de los Arcos. Los ciudadanos tienen el derecho de exigir que no nos mientan y pedimos que nuestros gobernantes municipales sean cuanto menos honestos en su proceder y realistas en sus proyectos. Por ello desde UPyD pediremos la información sobre el estado de las cuentas del ayuntamiento con el objetivo de conocer y luego transmitir a los ciudadanos transparentemente lo acaecido en este caso. No van a pasar ustedes, los de UPN, a la historia de nuestra ciudad precisamente como los mejores gestores y sí como quienes nos han llevado a una situación de muy difícil solución y de incierto futuro. Dejan ustedes a la próxima corporación la devolución de ese dinero gastado en no sabemos qué, salvo que nos lo quieran decir antes de que les obliguemos a ello.



Pero lo peor de todo este asunto es el silencio de la oposición, callada como un muerto, y ya sabemos que el que calla otorga. Unión, Progreso y Democracia apuesta por la regeneración democrática y la trasparencia de los servidores públicos en la gestión racional de los recursos aportados con tanto esfuerzo por los ciudadanos, en este caso los tudelanos. Hay que poner orden en un ayuntamiento gobernado desde hace tiempo por el caos económico, la desidia y la inercia, a la espera de que otros resuelvan esta situación en la próxima legislatura. Esperamos responsabilidades políticas si se confirma este bochorno y les pedimos que se marchen si no hacen bien su trabajo. Tudela se lo agradecerá.