Como lector y en ocasiones colaborador de este semanario, a pesar de la forma descarada e incorrecta que tengo de plasmar mis propias opiniones, tengo que agradecer la posibilidad, sin censuras ni cortapisas, que únicamente Plaza Nueva ofrece a un plumillas como yo.
Y como lo cortés no quita lo valiente, tengo que expresar mi inquietud sobre un artículo que no debe pasar inadvertido y que se refiere a un resultado deportivo en categoría Minibasquet Mixto, que enfrentó a los equipos tudelanos del Arenas y Génesis. Este artículo, en mi opinión, es una expresión manifiesta de la hipocresía que rodea el deporte base.
Nuevamente el árbol no nos deja ver el bosque y, como siempre he dicho, lo mejor del deporte son los deportistas. Tenemos que UNIR fuerzas para que la labor formativa sea eso, FORMATIVA, y enfocar la competición como una herramienta que fomente la autoestima, la salud, el afán de superación y la AMISTAD. Y fomentar la amistad no es acusar a nadie de hacer trampas en un partido de niños de doce años.
Mi apoyo para todos los que trabajamos por el deporte base, pero “ojo”, salir a ganar sí, pero al amigo y rival, nunca al enemigo.
