Opinión

Repartir limosna

El lunes, el Gobierno de Navarra aprobó destinar entre este año y el próximo 4,5 millones de euros para subvencionar las televisiones regionales con el fin, dicen, de “impulsar el funcionamiento de la Televisión Digital Terrestre y la incorporación a la programación de contenidos sobre la realidad navarra”.

Y por la misma regla de tres, Plaza Nueva y otros Medios deberían ser subvencionados con el mismo fin e idénticos objetivos: “Ayudar a cubrir las parrillas de programación en los ámbitos autonómico y local, mediante el fomento de contenidos de calidad, de estreno y de proximidad, relacionados con la realidad de la Comunidad Foral”, que indica el acuerdo de gobierno.

El nuevo formato TDT ha sido desechado por las grandes cadenas salvo en las grandes ciudades. Y por esa misma razón pocas empresas mostraron interés por las nuevas licencias aprobadas en Navarra en abril de 2004 que ahora quieren potenciar de forma arbitraria y “digital”. El “apagón analógico” forma parte de una evolución tecnológica natural que hará que la TDT se implante por sí misma. Por lo que promoviendo esta subvención cercana a los 750 millones de pesetas propician que un sector que está en crisis, salga de su delicada situación y aumente su producción propia de forma totalmente artificial.

Infinidad de otros Medios de Comunicación locales más pequeños ya estamos realizando un trabajo más que digno, con menos medios, llenando de contenidos zonas y comarcas abandonadas completamente por el Ejecutivo más allá de la Cuenca de Pamplona. Y en muy poco se acuerdan de apoyarnos o dejarnos andar sin cortapisas. Y sin pedirles nada. Aquí estamos.

No veo mal que Canal 6, Canal 4 y Popular Televisión se busquen la vida. Pero creo que es vergonzoso que se subvencione Medios de Comunicación que además en algún caso ni se ven en otras zonas de Navarra que no sean Pamplona en un año político como el presente.

¿O acaso el Gobierno de UPN-CDN está preparándose la Campaña electoral comprando a los Medios mediante la clásica prebenda de la subvención camuflada con excusas como las “mejoras”, los “contenidos”, los “objetivos” y otros eufemismos?

La Comunidad Europea prohíbe las ayudas directas a las empresas. Y ésta, es una burda forma de hacer salir adelante unos proyectos que en nuestra comunidad, dadas nuestras características geográficas y poblacionales, son difícilmente viables y perjudicarán a otras pequeñas empresas que, como la nuestra, salen al paso como pueden, pero de forma autónoma, sin tutelas, y sin necesidad de pedir limosnas.