Opinión

Reducir no es empeorar

Sorprende que, para una decisión acertada que

ha tomado UPN en Tudela, desde todos los foros se le esté criticando, incluida la derecha.



Sorprende, digo, porque es de perogrullo que un Ayuntamiento como el nuestro no puede cargar con la prestación de un servicio comarcal que emana de la Carta de Servicios Sociales y que es responsabilidad única del Área correspondiente del Gobierno de Navarra.



El Ayuntamiento de Tudela no necesita un CAIM, Centro de Atención Integral de la Mujer, que nos cuesta unos 250.000 euros anuales. Lo que debe hacer es reforzar la atención allá donde sea necesario y punto, y más si la economía no acompaña para más lindezas como se ha venido haciendo hasta ahora, en un tiempo de bonanza que ya ha pasado, guste o no.



Otra cosa es que figuras de Servicios Sociales como Técnicos de Igualdad o Educadores Sociales den el resultado debido...



Y digo esto porque es carísimo mantener Departamentos con abultados organigramas que nadie sabe a qué se dedican porque nadie controla, para, simplemente, desarrollar presupuestos de género, carteles no sexistas y otras acciones de atención a la Mujer, mientras a pie de calle no sólo la mujer, sino los ancianos, los niños, los varones, los inmigrantes, los parados, etc., necesitan atención, y un seguimiento específico.



¡Que ya vale de demagogia barata, porque reducir y reorganizar un servicio no debe ni tiene porqué implicar empeorarlo!