El Ayuntamiento de Tudela y la Junta de Seguridad Local van a impedir que los dos macrobotellones convocados por los jóvenes en la capital ribera para los días 1 y 15 de abril no lleguen a buen puerto. La concejala de Educación y Juventud, Merche San Pedro, ha admitido que el Consistorio no tiene una ordenanza que prohíba beber en la calle, pero no ve lógico ni positivo que la juventud se eche a los parques y plazas, botella en mano, a ponerse ciega, mientras iniciativas de ocio alternativo como el programa Otras Noches del consistorio tudelano ofrecen a estos jóvenes la posibilidad de disfrutar de diversas actividades sin echar mano del alcohol.
Aunque no vemos con buenos ojos la práctica del todo prohibido, es entendible que la concejala quiera ser consecuente con su política de prevención. Por su parte, los jóvenes pueden expresar sus protestas por los precios abusivos de chiquitos y copas, de otras maneras, como organizando una manifestación legal. De todas formas, ante la prohibición, pueden conformarse con los minibotellones que de forma natural, espontánea y bien vista se forman cada fin de semana en las zonas de marcha, donde -no nos engañemos- se bebe en la calle y nadie se rasga las vestiduras.
