Opinión

Medidas

Varas de medir, siempre ha habido muchas. Dependiendo del gusto y de la época, del caudillo del momento o, incluso, de la moda reinante en cada temporada. Las cosas se valoran indistintamente.

Antaño dependían del apellido o la posición, pero no logro entender porqué ahora las cosas han dejado hasta de tener la ilógica lógica del gusto del elegido a la hora de apreciar, sopesar, medir en definitiva, y cuantificar cuan Salomón.

Hubo un tiempo en que nuestros mayores medían la tierra tradicionalmente, pero la tecnología convirtió en hectáreas lo que antaño eran robadas, -aunque no sabemos bien a quién-. Más tarde, se hablaba de duros y ahora los cálculos se realizan por una sorprendente medida: Los ‘campos de fútbol’.

Digo bien, campos de fútbol que en los informativos sitúan al televidente, porque la cultura de la audiencia se cuantifica por balones de coeficiente intelectual y cantidad de ligas, torneos o trofeos obtenidos.

Después, te encuentras con conceptos subordinados al tamaño ‘metrosexual’ y terminas por no entender nada... ¡Para qué tanto sistema métrico decimal!