Opinión

Los plenos del ayuntamiento en domingo

Ahora que va a llegar la precampaña electoral de las próximas elecciones municipales sería conveniente que vayamos afinando en propuestas y que la ciudadanía se tome en serio en quién va a depositar su confianza porque la situación económica de nuestro ayuntamiento es muy preocupante.

En primer lugar quiero reflejar en este artículo, y como idea central, que los tudelanos y tudelanas necesitamos en nuestro consistorio personas, antes que políticos, que quieran trabajar por Tudela, sin apego a poltronas, no para hacer carrera política o para vivir a costa del erario público.



En este sentido creo que quienes deben de dar ejemplo de austeridad en la actual crisis económica, política e institucional en la que nos encontramos, deben ser precisamente quienes se presentan o nos presentamos a las elecciones municipales.



Por este motivo no cabe, a mi entender, que existan partidas económicas para remunerar la labor personal y política de quienes salen elegidos. Sólo deben ser remuneradas aquellas cuestiones que por impedimento o incompatibilidad personal de quienes son representantes, son de obligado cumplimiento en sus labores como concejales.



En este sentido exceptuando la figura del alcalde o alcaldesa, en la que entiendo debe existir una dedicación exclusiva remunerada por el consistorio, el resto de corporativos no deberían ser remunerados por su labor municipal.



Quienes quieran participar en política municipal en Tudela deberían asumir que su participación en Comisiones no puede significar un sobresueldo, se debe trabajar por la ciudad de forma altruista y sin intereses, ese tiene que ser el perfil de los y las políticas tudelanas. Aquí debemos marcar diferencia.



No es por lo tanto de recibo que nuestro ayuntamiento en estos cuatro años de legislatura tenga un saldo de gasto a favor de sus representantes políticos de 1.171.620 de euros y, a riesgo de quedarme corto, repartido en asignaciones de Alcaldía, asignaciones a corporativos, seguros, cuotas a la seguridad social, reuniones y conferencias, y gastos de representación en general.



La partida de Alcaldía es la más abultada y ello debería revisarse de inmediato en la próxima legislatura, una cuestión es dedicación exclusiva y otra tener sueldos que no se los puede permitir Tudela.



Si hacemos una extrapolación de los 195 millones de las antiguas pesetas que se ha llevado la corporación en esta legislatura, el resultado nos da que un concejal nos ha costado algo más de 9 millones de pesetas y si lo hacemos anual el resultado es que un concejal nos cuesta algo más de 2 millones de pesetas.



Pero además, no todos los concejales y concejalas cobran lo mismo, no todos y todas participan en las mismas o tantas comisiones y, por ello, estoy seguro que algunos y algunas cobrarán más que otros y por lo tanto el erario público se distribuye según los intereses de los partidos y no de las necesidades de Tudela.



Por todo ello, mi propuesta es muy sencilla y muy fácil de asumir: que los Plenos se realicen los domingos por la mañana y que su asistencia no implique remuneración alguna. Tudela se lo merece.