El obispo de Logroño recomienda que en plena discusión de pareja se cojan de la mano, eso y mirarse a los ojos, rezar una oración y pedirse perdón son cosas que para éstos célibes mandatarios, les parece que podría funcionar.
Pero claro, estos "señores" no tienen ni idea de lo que es la convivencia de pareja.
Su invento del matrimonio indisoluble donde el hombre era el cabeza de familia y mandaba a la mujer y ésta le tenía que obedecer ha desaparecido.
El decir que la Ley Natural es la que ampara el matrimonio cristiano es no entender nada de nada de la Ley Natural, ya que nunca han existido contratos en la Ley Natural (por eso se llama natural).
Desde el principio de los tiempos,funcionaba el aquií te pillo aquí te mato, hasta que se decidió defender a las mujeres y su prole de la violencia machista. Para ello se fundó el matrimonio, que quiere decir literalmente: en defensa de las madres.
Un contrato es antinatural por mucho que se empeñen los monseñores.
La igualdad de la mujer ha liberado a ésta de la sumisión al hombre,pero ha conseguido también el fin del matrimonio como se entendia hasta ahora.
Como todo se les cae, ya no saben que decir ni que hacer ya que la sociedad les toma por el pito del sereno y se ríe de sus propuestas por retrógradas e ineficaces.
Los rezos tampoco les sirven de nada y parece que Dios no escucha sus plegarias pues el aumento de los divorcios indica que el fin de su mandato impositivo es ya un hecho.
Cada vez les hacemos menos caso y sus amenazas de infiernos nos producen en vez de miedo risa, por ello Benedicto XVI parece que va a redactar un nuevo catecismo, ya que el último firmado hace poco por él está lleno de fallos teológicos, mitos y barbaridades que no tragan ni los mismos sacerdotes.
