La Cámara de Comptos ha presentado su informe sobre las cuentas de 2012 del sector público navarro, compuesto por 272 ayuntamientos, 348 concejos, 65 mancomunidades y 18 agrupaciones locales, y el balance no podría ser más alarmante: Aunque el sector local cumplió sus objetivos de estabilidad financiera, ese ejercicio, los ingresos municipales cayeron otro 9% y las subvenciones del Gobierno foral para inversiones bajaron un 30%.
Dicho así parece poca cosa, pero la realidad es preocupante. Si el Ejecutivo foral no transfiere recursos, a este paso las entidades locales no podrán mantener los servicios que prestan, al menos, al nivel actual de variedad y eficiencia, algo que la ciudadanía percibirá rápidamente a peor, claro.
De hecho, por primera vez en años, los municipios navarros han ingresado menos dinero que la media del Estado, que está en 1.180€ por habitante, frente a los 1.036 de aquí.
Si bien se paga menos contribución urbana, 148€ por habitante y año frente a los 209 de Zaragoza o los 221 de La Rioja... Los consistorios deben reaccionar.