Opinión

Las maletas que se van de viaje

Solas, y sin rumbo fijo, o por lo menos sin rumbo conocido. Cada día son 90.000 las maletas que se pierden por todo el mundo, y 10.000 maletas -y no es eso lo peor- se van a disfrutar de una vuelta por el mundo. Y tú, el viajero que pretendía tener un trayecto agradable, cuando salen a la cinta de equipajes, te quedas perplejo esperando que salga

tu maleta y ves que nunca aparece.

En 2009, el 15% de las maletas perdidas en Europa nunca fue devuelta a su dueño en el plazo de cuarenta y ocho horas, con lo que no tuvo otro remedio que apañarse, y el 49% de las pérdidas afectó a pasajeros con conexiones de vuelos, un porcentaje que se elevó al 69%. Si encima un total de 4,6 millones de maletas llegaron con retraso a su destino en Europa, esto supone un trastorno que no se puede uno ni imaginar. Menos, si nunca le ha pasado, pero la cantidad de dinero que esto supone es impresionante, si bien nunca puede llegar a satisface al pasajero que se ha quedado sin sus enseres.

La legislación vigente considera a la compañía aérea como responsable del daño ocasionado a los pasajeros y sus pertenencias durante el transporte.

En el caso de que tu maleta se retrase o deteriore, has de realizar inmediatamente una reclamación ante las oficinas de la compañía en la que has volado, hazlo en el mostrador de la línea aérea, en el propio aeropuerto. En España, en los aeropuertos de AENA,

tendrás que cumplimentar el impreso denominado Parte de Irregularidad de Equipaje (P.I.R.), y en

otros países encontrarás formularios similares.