Los políticos de UPN de Tudela viajan poco, está claro, porque plantear que el trazado del Tren de Alta Velocidad o TAV discurra alejado del centro de la ciudad, es una aldeanada mayúscula. Luis Campoy dejó su impronta en la ciudad antes de abandonar la Alcaldía: Peatonalizó el centro. Pérez Sola, de la mano de Rubio, legó a la capital de la Mejana su Potabilizadora, pero Luis Casado, como no espabile, va a dejar a Tudela atascada como un pueblo. Y ya ha dado marcha atrás en otros proyectos como el aparcamiento del Elvira España, sólo porque diez Madres protestaron de que se les mancharan las botas a sus niños durante las obras.
Digo esto porque cuando uno recorre Europa encuentra todas las estaciones de tren integradas en el centro de las ciudades como un elemento más de desarrollo, coordinado con Autobuses y otros transportes y servicios, y dejar pasar esa oportunidad ahora, hará que Tudela duerma durante años el sueño del olvido que, por ejemplo y con todos los respetos y cariño debidos, padece Tarazona. -Esa avanzadilla atascada de los ‘70-.
Digo esto con todo mi aprecio a nuestro Alcalde-Buena Persona, para que sea ambicioso y además de exigir al Gobierno Foral que el Congreso de Verduras tenga lugar, íntegramente, en la Ribera, haga ahora las gestiones oportunas para que el trazado del TAV vaya soterrado bajo la vía actual del tren. No hay otra si quiere que lo recordemos en el futuro con la consideración que merece.
No sólo debemos dar por hecho que Tudela contará con parada y estación del TAV, es que la ciudad, para ser ciudad de verdad de una santa vez, necesita ideas con nivel, no planteamientos carcas o de cortas miras... Hacer de la Plaza de la Estación el punto de encuentro de la Ribera, -soterrada como la magnífica Estación de Autobuses de Pamplona que dispone sobre sí de un amplio parque-, con espacio para un amplio parking subterráneo y con la vía férrea actual como alternativa al tercer puente sobre el Ebro y circunvalación, cerraría el crecimiento de una población que los últimos años ha sido, sin duda alguna, un despropósito. Mariano
