Cuando nació nuestro primer hijo, hace ocho años, decidimos llevarlo a los 18 meses a la Ikastola Argia de Fontellas-Tudela. Esa decisión estaba sostenida en base a que creemos que la Ikastola Argia es un centro plural, laico, con buenos profesionales, con un modelo educativo progresista y una oferta lingüística, euskera, castellano e inglés, excepcional.
La Ikastola es además una iniciativa social que se organiza como cooperativa de padres y madres y ello contribuye a la participación y cogestión en la mayoría de decisiones y actividades que emanan de la propia cooperativa.
La historia de los 25 años de la Ikastola Argia la han escrito sus profesionales, el alumnado y los padres y madres que han dejado la piel y algo más por llevar adelante este proyecto educativo tan ilusionante.
La Ikastola Argia es una ikastola ribera en la Ribera de Navarra porque así lo hemos querido y demandado los padres y madres que apostamos por este modelo educativo.
Ahora viene el Consejero Carlos Pérez-Nievas a decirnos que los libros de texto de nuestros hijos e hijas no se ajustan a la realidad navarra. Yo entiendo que en el CDN se tenga mucha prisa en coaligarse con UPN-PP para no quedarse fuera del pastel. Yo entiendo que el Consejero Carlos Pérez-Nievas quiera ser un político profesional, pero lo que no acepto como padre de ikastola es que quiera medrar y hacer méritos en política a costa de la educación de mis hijos.
Es muy fácil hablar de la realidad de Navarra desde el Gobierno de Navarra, desde el poder para entendernos, pero en Navarra hay muchas realidades. Desgraciadamente para el conjunto de navarros y navarras desde Franco hasta el día de hoy se nos ha querido imponer una sola realidad, la de la España, grande y libre.
¿De qué realidad navarra nos habla Pérez-Nievas? ¿De la realidad navarra que nace bajo el golpe fascista de 1936? ¿De la navarra republicana y sus miles de asesinados, represaliados y exilados? ¿De la navarra post-franquista que jamás ha votado su Estatuto de Autonomía, dígase “Amejoramiento del Fuero”? O tal vez es que los libros de texto de las ikastolas no reflejan la conquista de Navarra por Castilla en 1512 a sangre y fuego o sucesos conocidos como la Gamazada y que dieron pie al Paloteado de Monteagudo no aparezcan. Es posible que la editorial se haya olvidado de reflejar la persecución y quema de brujas que la Inquisición castellana ejecutó en nuestras tierras desde el Ebro hasta el Adour. Yo creo que a la Consejería de Educación le molesta eso, lo de la Geografía. Al Consejero le molesta lo mismo que a Patxi López, el mapa del tiempo, es decir Euskal Herria. Pero ese tipo de molestias no se quitan vía inquisitorial ni mandando a la Policía Foral a requisar libros a las ikastolas para ajustarse a la realidad de navarra. Esas molestias suelen ser degenerativas y acaban bastante mal, a no ser que se administre al enfermo una dosis alta de “pluralismo”. Pero esta vacuna parece ser que las grandes empresas farmacéuticas han dejado de producirla por su carácter solidario y gratuito y no haber dividendos que repartir.
Vacúnese señor Consejero y no juegue a la política con la educación de nuestros hijos e hijas.
Santi Lorente, padre y cooperativista de la ikastola Argia
