Opinión

La fiesta de los muertos

La Jerarquía católica se siente desbordada por la sociedad, que ya no le obedece.

En Noviembre, el pueblo celebra el día de las animas, con disfraces para los niños, en Diciembre la Navidad con el Papa Noel y la semana Santa, con vacaciones y festejos populares.

Se ha perdido el sentido religioso, de culpa.

Ellos siguen agarrados a lo de siempre, y luchan por que el pueblo les obedezca, cosa que ya no hacen gracias a Dios.

Tienen que rendirse a la evidencia, de que la información que recibimos, nos independiza de sus dogmas e imposiciones falsas.

Cristo, no vino a salvar a la humanidad, pues es ridículo, que Dios en su infinita bondad, por una chiquillada de la manzana, la castigase eternamente a unas torturas horribles en el infierno.

Jesús vino a dar ejemplo de vida, y conseguir el comienzo del Hombre nuevo.

Que no es otro, que igualarnos a todos con Dios, dejando de tenerle miedo:Dios y yo somos una misma cosa y lo que hagáis a los demás a mi me lo hacéis, de lo que se desprende que todos somos Cristo.

Todos somos semillas divinas, que caminamos a un fin superior.