Mientras el Pleno del Consejo Jacobeo analizó el domingo 13 en Santiago nuevas acciones de impulso de la Ruta Jacobea tras ser declarada Patrimonio Mundial, Tudela, que podría formar una jugosa parte de este ‘entramado’ cultural, no sabe ni de quién es su catedral, a tenor de cuanto consiente.
Mientras el Cabildo estudia poner un nuevo órgano para aumentar las capacidades musicales del templo, el Ayuntamiento espera reunirse en breve con los representantes de la Seo para actualizar el acuerdo en vigor entre las partes, que incluyen la gestión del Museo Diocesano del Palacio Decanal y los gastos de mantenimiento del templo, sin ninguna otra contraprestación, como podría ser dejar clara la titularidad del templo, que con toda su cara el Arzobispado inmatriculó a su nombre tras la inversión pública para su rehabilitación; o permitiendo un uso y explotación turístico y cultural pleno, que permitiera abrir el templo a todas horas para beneficio
y regocijo de todos.
Por supuesto que el Deán, Bibiano Esparza, debe disponer del espacio para el culto libremente, que es algo sagrado y respetable, pero como estamos ahora no es de recibo.
