Quiero con estas líneas romper una lanza por Mariano, director de este semanario. En la pasada revista, en su editorial escribió sobre lo acontecido en el Ayuntamiento de Tudela entre los sindicatos y el concejal de personal del PP, antiguo sindicalista, clérigo y legionario, si no me equivoco. Y, sin estar de acuerdo con esa editorial, o en las antipodas ideológicas con otros colaboradores, como el señor Guelbenzu por ejemplo, debo expresar ante todo mi apoyo a todas las personas que ejercen el derecho de expresarse libremente en esta revista, sean cuales sean sus argumentos.
El ejercicio de libre expresión está acotado en los medios por intereses políticos y económicos y es de agradecer que Plaza Nueva sea un medio abierto y plural a los ciudadanos.
Esto viene a cuento de que nunca llueve a gusto de todos, por eso los que estamos sometidos a las críticas tenemos siempre que llevar paragüas o fastidiarnos y que nos caiga el chaparrón encima.
Los sindicatos que han ejercido en los últimos años políticas de flexibilidad con los trabajadores hasta convertirse en un chicle gigante a 40º no pueden rasgarse las vestiduras ahora porque los trabajadores les den la espalda. Los trabajadores estamos padeciendo la bajada de pantalones, fundamentalmente de CCOO y UGT durante largos años ¿QUE PINTAN LOS SINDICALISTAS COMO CONSEJEROS DE ENTIDADES FINANCIERAS CON SOBRESUELDOS DIETAS E INDENNIZACIONES MILLONARIAS?
En lo que respecta a la junta de personal del Ayuntamiento, es legítimo y obligado que luchen por los trabajadores despedidos y por conseguir unas condiciones de trabajo dignas y adecuadas IGUAL QUE EN TODAS LAS EMPRESAS.
Por último para no extenderme (aunque quisiera) debo expresar mi asombro por el comportamiento y las palabras del concejal de personal. Acaso no es usted del partido del señor Rato, presidente de Bankia; del señor Fabra, que hace aeropuertos sin aviones y le toca la lotería todas las semanas; no es usted del partido que hunde a los pensionistas, elimina las pagas extras, establece el despido libre o favorece los colegios sexistas. Señor concejal usted no sabe ni lo que dice.
Pónganse todos de acuerdo para ayudar a los parados, a las personas sin hogar, a los que sufren las consecuencias de un montón de sinvergüenzas y dejen de tomarnos el pelo.
