Opinión

En Navarra sólo pagan autopista los riberos

La crisis económica ha hecho que el uso de la autopista AP-15 en 2013 haya vuelto a niveles de 2003, según explicó en la Comisión de Economía, Hacienda, Industria y Empleo del Parlamento Foral el presidente de la Cámara de Comptos, Helio Robleda, que indicó, además, que los dividendos obtenidos por esta vía por el Gobierno foral en los últimos diez años han sumado unos 97 millones de euros. Según Comptos, el Gobierno de Navarra, al ser accionista al 50%, recibe un dividendo, que en el periodo analizado ronda los 97 millones de euros, en torno al 70% de lo que supone la aportación que el Gobierno, en su política de incentivación, está aportando a las cuentas de Audenasa, que son el 38% de los gastos...

Dicho de otra manera, los riberos estamos pagando a una empresa privada por una infraestructura y un servicio que el resto de navarros reciben gratis en otras vías como la Autovía del Norte o la Autovía del Camino.

La autopista, de peaje entre Irurtzun y el enlace con la autopista del Ebro, AP-68, se construyó por concesión de la Diputación Foral y fue adjudicada a Audenasa, empresa constituida con capital privado en 1973.

En 1984 el capital de la empresa pasó a ser público, un 50% a manos del Gobierno foral, y la concesión se ha prorrogado hasta 2029, por lo que sería de esperar que en esa fecha -o mucho antes si fuera posible-, el Ejecutivo Foral "regularizara" esta anomalía, injusticia que hace pagar a los conductores riberos muchísimo más que a los de Pamplona y la montaña por emplear unas vías ya amortizadas y que deberían ser plenamente públicas.