El Presidente del Gobierno de Navarra ha decidido por fin dar unos días de descanso a los sufridos ciudadanos de esta Comunidad. Se va de viaje a Nueva York. Bien es cierto que existe una duda generalizada en la ciudadanía, sobre si es una decisión voluntaria o está inducida por los dirigentes de su partido.
Todo indica que esta decisión ha sido inducida para así conseguir también unos días de descanso con la ausencia, que bien merecidos los tienen. Aunque también han valorado de forma intensa qué era lo más conveniente:
a) Que el Presidente siga en Navarra intentando salvar a los ciudadanos de unos problemas que sólo él genera, para así ocultar su ineficacia e incompetencia, en un claro viaje a ninguna parte.
b) O que viaje a Nueva York, aunque sin saber por qué o para qué, acompañado de su dama de compañía, la señora Barcina, porque se está convirtiendo en un peligro para Navarra.
La segunda opción ha sido la elegida. Cada vez que Sanz habla, Carlos Chivite lo pone en ridículo y la perdida de votos los tiene asustados.
Sanz “El salvador” estaba convencido de que era necesaria su presencia en Navarra y en UPN. Para quitárselo de encima han tenido que recurrir al Patriarca, Sr. Rajoy. Actuando en nombre de este Patriarca, recientemente tomó la palabra el profeta Sr. Zaplana y, asumiendo las funciones de portavoz del Gobierno de Navarra, anunció la buena nueva para blindar Navarra: “El Partido Popular había decidido que UPN presentara en el Parlamento de Navarra una propuesta para derogar la Transitoria 4ª”.
La reacción fue inmediata. El Sr. Catalán, que no recordaba en qué sesión del Consejo de Gobierno se había acordado su cese y el nombramiento como portavoz del Gobierno de Navarra del Sr. Zaplana, pidió tiempo para pensarlo, reconocida su disposición a obedecer y, como no podía ser de otra forma, intentó desviar la atención hacia sus más claros contrincantes, José Luís Rodríguez Zapatero y Carlos Chivite.
La agresión del PP, socio de UPN, al autogobierno foral ha sido clara, aunque no parezca importarle al embajador del Reyno, Sr. Sanz. Como el viaje estaba decidido, “El salvador” Sanz se despidió tomando café en Madrid y haciendo las siguientes declaraciones, quizás en un momento de lucidez o como consecuencia de un desliz provocado por la ilusión del viaje a Nueva York:
- “El acercamiento de presos a cárceles vascas es una de las medidas que se pueden adoptar siempre y cuando exista una clara voluntad de abandonar las armas y de arrepentimiento”.
- “Creo que la política de reinserción tiene caminos que inspeccionar... se puede ser generoso cuando exista una clara voluntad de abandonar las armas”.
- “La posibilidad de que los socialistas navarros pacten con los nacionalistas está dentro de las reglas de juego democráticas”.
