Opinión

Democratización del cohete

A escasas fechas de que el cohete surque el cielo tudelano y abra las fiestas de Santa Ana, la polémica de la autoría del lanzamiento del chupinazo vuelve a salir un año más a la palestra, de manos del grupo municipal de Batzarre. El próximo 24 de julio el encargado de tal honor va a ser el alcalde, Luis Casado, quien ya se hizo cargo de tal menester el primer año de esta legislatura que ya va tocando a su fin. No les falta razón a Milagros Rubio y a José María Lacarra cuando plantean que todos los grupos políticos, gobiernen o no, deben tener ese derecho, y no sólo ellos, también cualquier ciudadano que, por una u otra circunstancia, haya destacado o hecho méritos en el año por nuestra ciudad. Algunas tradiciones como ésta, con el alcalde como único protagonista (aunque UPN haya seguido las enseñanzas de Campoy, quien abrió la ronda a otros ediles de su mismo grupo y, con ello, a las mujeres) se deben ir abandonando, en pro de la democracia y la pluralidad. Las peñas, sin duda, podrían ser unas buenas protagonistas de esa apertura del jolgorio, en el que ellas tienen mucho que ver a lo largo de toda la semana festiva.