Nos tocan vivir tiempos difíciles. Ya podemos hablar de la crisis sin que nos tachen de antipatriotas; es más creo que se puede utilizar el término “recesión” sin que por ello nos tomen por enemigos del país. Sube el paro y se disparan los precios. Este gobierno dice que es quien más y mejor protege a los desempleados mientras acude al “rescate” de bancos y cajas con millones de euros. Así que después de unos años de bonanza nos tenemos que ir preparando para lo que muchos ciudadanos no conocen y que denominamos como “apretarse el cinturón”. Pero el hombre sabe adaptarse a las circunstancias, o hemos aprendido a hacerlo. El que gana 1.500 euros, con eso vive, trata de llegar a fin de mes y ahorrar para un capricho en Navidad, o aprovechar unos días de vacaciones en el verano. Los mileuristas lo tienen peor y del mismo modo han de subsistir los 30 días del mes y conformarse sólo con una semana de vacaciones, y cerquita. O ni eso.
De igual modo que en cualquier familia, sucede en el Ayuntamiento. Si hay menos ingresos, no puedes gastar como el año anterior. Aquí de momento las tasas municipales se han subido sólo el 3%, por debajo del IPC, éxito dudoso que se arroga el PSN municipal, mientras el PSOE en Madrid nos sube el gas el 9% y la luz podría subir en enero más del 20%. Pues también aquí se siente la crisis y por tanto se hace necesario adecuar los presupuestos a las circunstancias, o sea a los ingresos. ¿Esto es recesión o contención?
Lo único que tenemos claro es que no podemos gastar lo que no se tiene y debemos actuar con responsabilidad y honradez, y explicar al ciudadano con claridad y siendo realistas la situación en la que se encuentra nuestro ayuntamiento. Sería una irresponsabilidad gastar por encima de lo que tenemos y endeudarse para tener contentos a los ciudadanos y arruinar las arcas municipales. Eso no lo vamos a hacer, no nos lo perdonaría el pueblo de Tudela. Esta situación puede ser transitoria y puede durar dos o más años. Quiero con esto decir que los presupuestos de 2.009 van a verse reducidos de forma importante y que eso lo va a notar la ciudadanía en muchos aspectos y habrá que priorizar. Por lo tanto, que a nadie le coja desprevenido.
Por lo que respecta a la Concejalía de Festejos es seguro que nos van a pasar la tijera y no la de la censura. Y en ausencia de euros, hay que utilizar la imaginación y buscar patrocinios y colaboración ciudadana. Respecto a la imaginación nadie puede dudar del uso que hacemos de ella. Sólo basta darse cuenta, por ejemplo, en las últimas fiestas, de todo lo que se programó con el presupuesto que había. Y es que en Tudela, excepción hecha de las corridas de toros, todo lo demás es gratis para el ciudadano. Con un poquito más de dinero que el año anterior conseguimos darle otro aire a las fiestas. Ya se, ya se, que Tudela es de los ayuntamientos que menos dinero per cápita dedica a sus fiestas. Pero es lo que hay y trabajamos para corregir este dato. El patrocinio también es importante y nos encontramos con varias empresas tudelanas que colaboran en diversos actos puntualmente. Y respecto a la colaboración ciudadana pues sería deseable una mayor implicación y no quedarnos en la acera y criticar lo que vemos en vez de echar una mano.
