El Gobierno de Navarra y, concretamente el departamento de Cultura, ha decidido eliminar el pasado año las becas para la ampliación de estudios artísticos en centros nacionales y del extranjero. La pianista Eloy Orzaiz, la mezzosoprano Maite Beaumont, a la bailarina Marta Coronado y al pintor Iñaki Lazkoz han manifestado su rabia e indignación por esa decisión del Departamento de Cultura. Todos coinciden en una cosa: sin estas becas no habríamos salido adelante. Quizá hoy sin esas ayudas no existiría la soprano María Bayo, el pintor Juan José Aquerreta y el compositor Agustín González Acilu; todos ellos artistas de renombre internacional.
Es deber de los poderes públicos facilitar el desarrollo intelectual, artístico y cultural de la población y apoyar la formación de los grandes y prometedores talentos que surjan en nuestra comunidad foral. Se trata de una inversión cultural que revertirá en toda la ciudadanía ampliando nuestros expectativas intelectuales, desarrollando nuestra sensibilidad artística y ampliando nuestros horizontes de reflexión, vale decir, humanizándonos. El Gobierno de Navarra no puede dar la espalda a lo más granado de los jóvenes talentos de las distintas disciplinas artísticas. Sin ellos nuestra existencia sería, sin duda, más gris y aburrida.
Para finalizar ruego al Exclmo. Sr. Presidente del Gobierno, Miguel Sanz que reconsidere el asunto por el bien de la cultura navarra. Al mismo tiempo, hago un llamamiento a la movilización de quienes han disfrutado de esas ayudas: María Bayo, Juan José Aquerreta, Agustín González Acilu, y tantos otros. Les ruego que se movilicen para que otros jóvenes tengan las mismas oportunidades que ellos. Bastaría con una carta dirigida al Presidente del Gobierno, firma de un manifiesto, o lo que se les ocurra. Lo mismo digo a los partidos políticos y a los concejales de cultura de Navarra. Yo, por mi parte, como concejal de cultura de Ablitas, me quejaré formalmente y apoyaré todas las actuaciones tendentes a la reposición y fortalecimiento de estas ayudas.