Opinión

Cómo afrontar una crisis desde una PYME

En los tiempos que corren, no hay mejor forma de convencer del éxito de las PYMES que dar los argumentos de lo que es un trabajo bien hecho. Este es el caso del sector de la venta del material eléctrico y en el asesoramiento técnico de esta, se requiere de la unión de dos aspectos fundamentales: fuerza y dedicación. Estos dos aspectos, aunque en un primer momento puedan parecer generales y ambiguos, se consiguen en el sector con la inestimable colaboración de clientes y proveedores, protagonistas sin duda de este tipo de negocios.

Uno de los aspectos más importantes es el adaptar el quehacer diario a las necesidades de cada cliente, independientemente de cuáles sean éstas, unido a la realización de visitas con cierta periodicidad, que hagan que los clientes se sientan atendidos, cómodos y se les resuelvan los problemas o dudas con la mayor la rapidez posible. Esto permite que el cliente gane en competitividad, y por tanto se pueda conseguir su fidelidad lo antes posible.

Con unas modernas instalaciones, ubicadas en un punto que resulte muy accesible al profesional de la zona, y el asesoramiento técnico del personal con capacitación técnica adecuada, se logra una mayor fidelización del cliente que hace posible el acercamiento de estos al punto de venta, lo que resulta especialmente cómodo en el trabajo del día a día.

En este sector, el mantenimiento, cuidado y comodidad de las instalaciones de trabajo apoyadas en un banco de trabajo en el que los clientes puedan realizar cualquier tipo de montaje y a los que se les preste, en caso de ser necesario, las herramientas para poder realizarlos, es un valor añadido que permite a la empresa destacar del resto de sus competidores.

El poseer un aula de formación dotada con los últimos medios técnicos en la que impartir con total comodidad cualquier tipo de cursos de capacitación, jornada técnica y/o demostraciones de funcionalidad de los productos objeto de presentación posibilita poder cubrir todas las necesidades que los clientes puedan demandar.

Merece especial atención el stock de los proveedores con los que se trabaje, ya que se debe disponer de una importante cantidad de los productos más demandados en los almacenes, con las principales marcas del sector, para poder suministrar a los clientes con total celeridad. De esta manera, se trabajarán todos los materiales correspondientes a las diferentes familias de productos tales como: aparellaje, iluminación, conductor, aire acondicionado, telecomunicaciones, pequeño material, canalización y envolventes necesarios en el sector residencial, terciario e industrial al que se dirige la actividad diaria.

Establecer de antemano un plan de ventas, en el cual se haga referencia a unas estrategias muy bien definidas para el mantenimiento de clientes, clientes nuevos, recuperación de clientes y fidelización, es un aspecto a tener muy en cuenta. Una calidad en la venta basada en una política de incorporación, motivación y retención del personal, con un plan de formación, permite a la empresa alcanzar con antelación los objetivos planteados, pese a vivir tiempos de crisis, recesión o como se quiera llamar a lo que nos esta tocando vivir.