Opinión

Bardenas, una pena

El tema del polígono de las Bardenas es de esos temas del que año tras año sigues oyendo hablar, del que ignoras muchas cosas y donde, curiosamente, los protagonistas siguen siendo los mismos, lustro tras lustro.

Soy de la opinión de que Navarra ya ha cumplido con creces con la seguridad nacional o europea, de que tras 50 años de existencia debe desmantelarse y de que no me gusta el riesgo que suponen esas prácticas de tiro tanto para las poblaciones cercanas como para el mismo enclave natural.

Pero mi carta no es una crítica a los 20 años más en que al parecer vamos a tener polígono, ni a lo injusto de la decisión, ni si el dinero o la propiedad que dicen se ha conseguido merece la pena, etc. Tengo claro que hay muchos intereses creados y que el dinero de Defensa viene bien a las arcas municipales de los pueblos congozantes con lo que el polígono se convierte en una mera transacción comercial sin más. Lo único que interesa es el dinero que nos pagan y poco más.

Mi crítica va destinada al sainete, al espectáculo circense que todos los protagonistas representan en este negocio. Por una parte el dúo de baile principal, D. José Antonio Gayarre y Dña. Milagros Rubio, que como el dúo Pimpinela representan un baile, una canción eterna en la que ambos se tiran los trastos, se descalifican y se enfrentan con una sonrisa cómplice y fotogénica a la vez. A ambos hay que reconocerles una cosa, desde que tengo noticias han sido constantes y firmes en sus posiciones y éstas no han variado ni un ápice a lo largo de los años.

Pero no nos engañemos, ambos sacan réditos de este asunto. J. A. Gayarre sigue gracias al polígono en el escenario político navarro y es gracias a la Junta de Bardenas que preside por la que su voz se sigue oyendo y se tiene en cuenta en la política de nuestra pequeña Comunidad. Por su parte M. Rubio debe su imagen de defensora, de Quijote matagigantes (en este caso aviones militares) en gran parte al dichoso polígono.

El mayor problema de Milagros es que ha politizado de tal forma el tema del polígono de tiro que muchos ciudadanos de a pie como yo, aún estando a favor de su desmantelamiento, nunca iríamos a una manifestación convocada por ella o su partido, porque banderas, siglas, o pancartas políticas se mezclan con un tema que debería ser tan neutro como la propia tierra Bardenera desgastada por el sol.

No obstante son los otros protagonistas, los partidos políticos, los que juegan al despiste más absoluto en este tema. Centrándonos en Tudela, me he visto sorprendido de lo poco que vale lo acordado en un pleno y lo voluble de la opinión de los políticos. Y es que hemos pasado de votar el desmantelamiento del polígono por unanimidad en Tudela a que los partidos mayoritarios tudelanos (tanto PSOE como UPN) voten a favor en Junta de Bardenas. Esto que a mi modo de ver es inconcebible, se justifica simplemente en que han seguido directrices de sus superiores navarros o nacionales.

Y me pregunto: Si esto es así ¿Para qué la votación primera en el pleno municipal? ¿Para qué arriesgarse a votar algo que no puedes trasladar a donde realmente se decide (la votación en sede Bardenera) sin el permiso de tus superiores? ¿qué credibilidad política pueden tener unos ediles que por convicción votan una cosa y por orden del partido lo contrario?

En definitiva, que denoto con todo esto qué poca importancia tiene la ecología, la seguridad, el riesgo etc etc ante los réditos políticos, el dinero o la política en general. Una pena.