No podéis auxiliar al pobre arruinando al rico. No podéis evitar contratiempos gastando más de lo que ganáis. No podéis promover el carácter y el valor desincentivando la iniciativa y la independencia. No podéis ayudar continuamente a los hombres haciendo en su lugar lo que ellos deberían hacer por sí mismos”. Lincoln en su histórico discurso de 1860 ante el Congreso.
¡Qué peligro tienen los políticos! cuando quieren ayudarnos a salir de la crisis, cuando se ponen estupendos y anuncian medidas. Tienen la convicción de que el gasto público crea trabajo y es benefactor. No explican que esos trabajos no son duraderos y que el dinero sale de los impuestos sobre la ciudadanía, o de la deuda, que al final... Intentan distribuir una riqueza, desconociendo, que cada vez en estas circunstancias, es más difícil crearla.
No se conforman con tirar del Gasto, sino que utilizan toda una artillería argumentativa ¡que si tal medida ahorra energía, que si es así, o asá! No digamos cuando están todo el día con la monserga de que ¡la crisis es una oportunidad! Parece que lo será más, para los lobbys, que tocados por la barita mágica de los planes renoves o asimilados, les ayudan a vender (teles, frigoríficos, coches, suelo, viviendas) con el dinero de todos. Ayudan, en muchos casos, a los que se endeudaron tanto, que no parece asumible una situación de desaparición.
El Plan Renove alemán ayuda a Navarra, vía más ventas de Polos. En este caso los navarros somos los agraciados por la barita mágica alemana, pero pienso que a los sufridos ciudadanos alemanes no les producirá tanto contento. No hay más que ver, las dificultades de Merkel para seguir a los anglosajones, en la locura de sus planes financieros.
Para los que no son relevantes por su dispersión, las micro pymes, los autónomos, los jóvenes hipotecados, y su muerte financiera no da titulares. ¡Maldita la gracia que les hace! que se ayude a unos, a costa de todos. Para que encima, estén aguantando, tantas dificultades, por la falta de liderazgo, tanto de políticos, como de banqueros, que no consiguen recobrar la confianza crediticia, relacionada en España con el suelo de los precios de los inmuebles.
Ahora ¡para más inri! el Rector de la UPNA, sale a la palestra, con el proyecto de la Facultad de Medicina, ¡parece que sólo piensan en agrandar su parcela de poder!, ¡Dice ahora, que no es más caro que la extensión de la UPNA a Tudela! Si aquello ya fue una barbaridad, ahora quieren ahondarla, en la actual situación de incertidumbre, para más escarnio.
Si los datos de Navarra Confidencial no son desautorizados: sobran médicos en Navarra, y es una autentica locura platearnos dicho gasto. Si además es cierto lo que me cuenta un hermano médico: que en España se forman buenos y suficientes médicos. Que el problema es que no salen plazas, y se les paga poco. Es lógico que se vayan fuera, unos 2.500 a Portugal donde les pagan más. En conjunto, más de cuatro mil médicos españoles están trabajando fuera de nuestras fronteras, en distintos países de la U. E. La solución parece no apuntar en la dirección de costear la formación a más médicos, sino en pagarles más, para que no se vayan fuera.
Parece que ZP quiere que el tandem Salgado Blanco, engrasen la máquina del Gasto Público como instrumento para salir de la crisis. ¡Un horror! Ahora que tienen despejado el campo, sin los Solbes boys. ¡Cuántos años tardaremos en pagar la factura!
El centro derecha debe plantar cara a la izquierda mediática y cultural, debe trabajar por una justicia independiente. Debe elevar el espíritu cultural, cívico y moral de los españoles. Si la izquierda sigue empeñada en diluir la tradición, la moral humanista, el pasado histórico y privatizar las creencias religiosas de los españoles. La derecha debe fortalecerlas con más empeño, porque los españoles se sienten más cerca de estos valores, que de los que encarna la izquierda zapaterina, que nos gobierna. El centro derecha se parece demasiado a los socialistas, y se deben percibir diferentes ¡Esclarecer, que no todos los políticos son iguales!
En una España con valores, Zapatero difícilmente sería Presidente del Gobierno. Una nación orgullosa de sí misma, con valores fuertes, es incompatible con la visión de ZP. Para ello la derecha, al menos necesita: una capacidad de liderazgo capaz de llevar a cabo una regeneración, no sólo de las instituciones, sin más, sino de la ciudadanía, sin complejos centristas, ni miedo al qué dirán. Necesita una visión histórica a largo plazo, capaz de ver que España avanzará o retrocederá más allá de la crisis económica, de las próximas encuestas, o de las próximas elecciones.
Sólo trabajando a largo se puede realmente cambiar la deriva actual, y no estar guiados por ¡Quítate tú, que me pongo yo!
