Es notorio el paralelismo entre Eneko Larrarte, exalcalde de Tudela por Izquierda Unida, y Macarena Olona, política exestrella de Vox. Cada uno situado en un extremo del arco político, pero ambos con igual reacción de pánico cuando vienen mal dadas.
La señora Olona dejó la portavocía de Vox en el Congreso de los Diputados para ser casi segura Vicepresidenta de Andalucía, pero como los resultados electorales no alcanzaban (el PP consiguió la mayoría absoluta) y ante el panorama de pasar cuatro años como portavoz de su partido en el Parlamento Andaluz, súbitamente enfermó y dijo que abandonaba la política para, transcurridos tres meses, comunicarnos que ya se había curado -enhorabuena- y que deseaba retomar su grado en Vox-España, a lo que sus conmilitones le dijeron aquello de «verdes las han segado».
Eneko Larrarte, siendo alcalde de Tudela, perdió las elecciones en 2019 (Na+ sacó mayoría absoluta). Seguramente padeció una gran decepción, un poco al ver como sus desagradecidos paisanos minusvaloraban sus desvelos por la ciudad, y un mucho al verse reducido a simple concejal. Pero su contrariedad terminó en cuanto el Gobierno de Navarra, en pago al apoyo de IU a la presidencia de Chivite, le ofertó la Dirección General de Vivienda -estupendamente retribuida-, oferta que don Eneko no desaprovechó. Abandonó Tudela a la carrera y asentó sus reales en Pamplona. Curiosamente, a Larrarte y a Olona solo les duró “el luto” tres meses…
Abundan los casos de quienes han aguantado a pie firme sus contrariedades electorales. Sin ir más lejos en Pamplona: Enrique Maya entre 2015 y 2019 o Joseba Asiron entre 2019 y hoy (aunque Dios nos libre de otros cuatro años con “Conan-Asiron el Destructor”). Don Eneko, los valientes afrontan en pie sus contratiempos y cumplen con sus compromisos. Lo que se infiere de su actuación, dicho suavemente, es que usted se escaqueó, que huyó de Tudela abandonando a los votantes que confiaron en usted.
¡Y ahora, tres años más tarde, deja Pamplona y dice que vuelve a Tudela “quizá” para encabezar una coalición de izquierdas para el 2023! ¿Es que sus correligionarios ven en usted, electoralmente, el último clavo ardiendo al que agarrarse? ¿Y usted, visto lo visto, pretende que los tudelanos vuelvan a confiar en su palabra? Yo no soy de Tudela, pero si lo fuese…
