Opinión

Pandemia de miedo y solidaridad

Esto del COVID-19 va a suponer un antes y un después impresionante y que marcará nuestro futuro, profundamente. Como el derrumbe de las torres gemelas de Nueva York aquel 11 de septiembre de 2001 o la quiebra de Lehman Brothers en 2008. A nivel humano, este Coronavirus ha desatado los miedos más profundos, pero también, y afortunadamente, ha hecho aflorar lo mejor de nosotros mismos.

Está en juego nuestra salud, la Salud Pública con mayúsculas, pero también nuestra capacidad de empatía, cooperación, colaboración, ayuda y respeto... Por ello, pensando en positivo, bienvenida sea esta epidemia si va a ser la forma de ponernos a prueba como personas y de hacernos salir de nuestras ocultas cuevas.

De momento, y no hemos hecho más que comenzar la obligada cuarentena colectiva, las muestras de agradecimiento a todos los profesionales, de apoyo y ayuda a mayores y dependientes, de reconocimiento de lo que cada parte, cada profesional, empuja al todo colectivo, va por el buen camino.

Habrá que dejar atrás el temor natural a lo desconocido, la arrogancia de la protección personal y con ello lograremos alcanzar unas cotas de humanidad, educación y respeto que la sociedad  estaba perdiendo.

¡Afrontemos esta prueba con tesón y con la humildad de entender y reconocer, que sólo somos simples seres humanos!