Los inmigrantes no son el problema

Los países de la Unión Europea andan estos días desbordados por completo. La oleada de inmigrantes que están llegando desde un continente africano descompuesto y a la deriva, tiene en vilo a una comunidad ociosa, rica y ensimismada en su isla de bien. Sin embargo, la realidad ahí afuera es bien otra.

Entretanto, Europa, como no tiene proyecto de futuro ni de nada, no sabe resolver y atender este problema humanitario debidamente.

Somos nómadas por naturaleza, y así se ha construído y enriquecido la civilización a lo largo de la historia, de modo que no saber crear un continente modélico en todos los órdenes, frente a los grandes bloques exteriores -léase EEUU, Rusia, China, mundo islámico, etc.-, es garantizar la muerte de un modo de vida ideal. Así que mientras culpemos al pobre que se mueve por miedo o hambre, nunca podremos llegar a nada como alternativa idílica y viable. Si no reaccionamos, tenemos los días contados ante la realidad.