Nuestros políticos forales parece que se toman muy en serio la Ribera porque, cuando menos los esperamos, hacen acto de presencia para dar a conocer obras e inversiones, o para contradecirlas. Y ya se sabe... “Obras son amores, que no buenas razones”.
De lo que se trata es de que en lugar de tanto representar preocupación, veamos realidades sobre la mesa. Por ello, sorprende la presencia de la presidenta Chivite en Tudela la semana pasada para adelantar inversiones de unos 110 millones en Salud y Educación; que al día siguiente matizó y desestimó, también en Tudela, Javier Esparza, portavoz de Na+ y presidente de UPN, calificándolas de “tomadura de pelo y engaño”.
Así que, bienvenidos sean siempre, pero lo que necesitamos son hechos, no palabras, ni gestos. Necesitamos el dinero de la indiscutible e indiscutida necesidad de la Carta de Capitalidad de Tudela, también recursos para el Teatro Gaztambide. Es necesaria una apuesta clara por los Centros de Salud y el Reina Sofía, que demandan reorganización y más profesionales. Deben aclararse de una vez con el dinero tirado hasta ahora con el TAP, o TAV, o como lo quieran llamar, y que nos cuenten cómo se va a quedar Tudela con una supuesta nueva estación de tren fuera de sus calles... En definitiva... menos careos a la contra, y más colaboración institucional y política para avanzar de verdad. ¡Que ya vale de ruido!
