Se dice que si lo que ocurre no se cuenta, parece que no ha pasado. Durante treinta años en Plaza Nueva habéis sido los encargados de transmitir la actualidad local. Lo que pasaba – y muchas veces no se contaba – en las localidades del sur de Navarra y sus comarcas limítrofes. Gracias a esta revista, sus lectores y lectoras han podido conocer qué ocurría en sus pueblos dando entidad a la acción de sus propios habitantes.
El principal valor de Plaza Nueva es, precisamente, su cercanía. Su capacidad para contar las historias locales desde lo local. Por estas páginas no solo ha pasado la información estrictamente periodística. Plaza Nueva ha sido transmisora de las vidas de los vecinos y vecinas de esta zona y que, durante treinta años, han transmitido cómo ha cambiado nuestra sociedad en las últimas tres décadas.
En un momento de profundos cambios para las empresas de comunicación es de agradecer la apuesta empresarial de Plaza Nueva por el periodismo de cercanía. Que este proyecto haya crecido hasta consolidarse y cumplir los treinta años es un hecho empresarialmente relevante y un verdadero hito en el ámbito de la comunicación. En este tiempo – y sin dejar de lado su versión impresa – Plaza Nueva ha sabido adaptarse a los cambios tecnológicos sumando a la revista la versión online, la transmisión de información mediante redes sociales y la emisión por radio.
El periodismo local fuera de las grandes ciudades es una herramienta de cohesión territorial. Un modo de fijar población y de luchar contra ese fenómeno de la España vaciada que es tan valioso como las infraestructuras viarias, los recursos educativos sanitarios y educativos o las oportunidades de empleo. Porque quienes tenemos la responsabilidad de que las cosas ocurran, también necesitamos que haya alguien para contarlo.
¡Enhorabuena a Plaza Nueva por estos treinta años de trayectoria y ánimo para continuar con vuestra labor muchos años más!
