Opinión

Mutilación comercial

Hoy vamos a hablaros de lo que denominamos “mutilación comercial femenina”. Quizás sea un concepto desconocido para gran parte de la sociedad pero que hace referencia a eliminar los michelines, las arrugas, las canas, las manchas y todo aquello considerado “imperfecto” y asociado a la mujer para un uso comercial intencionado y consumista.

Si profundizamos en el tema descubrimos que cuando se vende un producto y se publicita, en la mayoría de las ocasiones, no sólo se nos está vendiendo el artículo sino que, también, se nos quiere vender el ideal de mujer perfecta y completa. Esta mujer viene a ser bella, joven, delgada, blanca, heterosexual, sexi… Es decir, una mujer objeto sumisa a los roles de belleza, cuidado y limpieza; fiel al amor romántico y consumista para alcanzar la perfección que, culturalmente, se nos quiere imponer. Pero estamos hablando de ideales impuestos e irreales con los que no nos sentimos identificadas, que no compartimos ni buscamos si pensamos y reflexionamos sobre ello. 

Qué duda cabe de que el interés por relacionar estética con felicidad, además de cosificar a las mujeres, tiene un importante trasfondo económico. Se prevé que la industria cosmética alcance en 2022 una facturación mundial de 347.000 millones de€ al año, con un crecimiento del 4,3% cada año.

¿Por qué para vendernos un producto nos tienen que mostrar unos pechos voluminosos, una piel blanca, un peinado de horas…? No perdamos el tiempo en esta imagen, en estos aspectos superficiales que nos condicionan en el día a día y dediquémonos tiempo a explorar nuevos espacios, nuevas formas de ser y estar, coherentes con nosotras mismas. 

¡No somos una mercancía!

Frente a ello seamos sutiles, conscientes, críticas y coherentes con esta venta y mensajes subliminales. Reaccionemos ante lo injusto, insano, desigual y violento, para romper con lo que se espera y se considera deseado para nosotras. Tomemos las riendas de nuestras compras sabiendo lo que nos gusta y lo que queremos; y desechemos aquello que se nos quiere imponer, no callemos ante lo intolerable y cortemos de raíz con el consumo compulsivo y por inercia.

Esta no es una tarea sólo de mujeres, sino de toda una sociedad para que rememos en la misma dirección. Porque si queremos realmente una sociedad igualitaria y libre que permita la diversidad, debemos ir de la mano todas las personas. Hoy hablamos de la mutilación comercial femenina pero también existe otra mutilación comercial masculina que condiciona, daña y perjudica. Incorporar a los hombres a esta fiesta consumista supone duplicar el número de clientes objetivos y de beneficios.

Luchemos para que no se nos juzgue por nuestro aspecto y sumémonos a un consumo responsable, consciente, crítico y transformador que protege a las mujeres y a sus libertades ocupando otros espacios y otros roles. De esta forma, la lucha será más liberadora, poderosa y compartida.

Gracias por leernos y gracias por sumarte y cooperar si crees que esta también es tu causa. 

8 de marzo día internacional de la mujer “más mujeres al frente de la acción social”

Belén Arnedo
Pueblos Hermanos

Luis González Lorente
SETEM

Álvaro Cía
Sumaconcausa